Capítulo 1

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Sentí como era sacudida por los hombros, no sabía por quién ni porqué pero cada vez sus movimientos eran más seguidos y fuertes. Me obligué a abrir los ojos y tratar de recordar lo que había pasado,  como flashes me vinieron a la mente una sucesión de imágenes inquietantes:
La cama
El cadáver
Sangre
La policía... y por último chocarme contra algo.
Todo había salido mal. Según el trato vendrían a por mi y me pondrían a salvo, pero me dejaron a la intemperie.  Debería haberlo imaginado.

- Ey ¿quién eres?- preguntó la figura borrosa.

- Podría hacerte la misma pregunta. ¿Vas a entregarme?- reproché a la oscuridad, no era capaz de ver nada en ese callejón.
- Oh eres tu. Me gustaría, pero me han contratado para protegerte. Ven conmigo.- me levantó de un movimiento y me puso contra la pared. - Dame las armas,  se que llevas más de una.

- ¿Quién te ha contratado? -bufó pesadamente

- Adivina.

- No necesito su ayuda, ya no tengo nada que ver con él. Cumplí el trato y ahora tiene que dejarme ir y darme el dinero.

Parecía cansarle el hecho de que le reprochara lo indignada que estaba, pero peor era mi situación. No quería irme con él, y si no salía de allí me arrestarían de por vida. Tenía que esfumarme,  desaparecer como si me hubiera tragado la tierra.

- No hay dinero que valga si te reconocen la cara,  querida. - una persona más apareció, y en cierta parte me habría gustado que me pescaran en el hotel antes de tener que aguantarle.

- Dame el dinero que acordamos y déjame en paz.  Ya he hecho lo que querías. - Se acercó tanto esa segunda figura, que pude ver ese brillo maligno en su mirada, tan inquietante como siempre.

- Tras tres largos meses sin verme... ¿y así recibes a tu padre?

Asesina por accidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora