Un nuevo comienzo | Rickyl

Capítulo 6

"No es real"

- ¿Darle una oportunidad? ¿A nuestro enemigo? - Gruñí.

- Él no es nuestro enemigo...- Negó el hombre de tercera edad sin moverse de su lugar viéndome con una expresión de preocupación y cierta decepción.- Ni siquiera tú enemigo, no le has dado una opor---

- ¡Porqué no la merece! - Dije con cierta exaltación al sentarme en la orilla del colchón viendo a Hershel fijamente.

- ¿Quién lo dice? - Cuestionó y aunque fuera raro en él, pude notar cierto enojo en aquella pregunta.- Rick, creí que me escucharías después de lo que hablamos.- Agregó.- Pero me equivoque. Al final tú tienes la última palabra Rick, y si decides matarlo adelante, no nos meteremos... Te seguiremos, pero si en verdad quisieras lo mejor para nosotros tratarías de ver lo que "tú familia ve" y comprender que no es que lo aceptemos a él, es más porque queremos protegerte.- "¿Protegerme, de qué?" - Así como tú lo has hecho hasta ahora con nosotros, es nuestro turno de evitar que te arriesgues...

- No me arriesgo a nada.- Repliqué

- Rick, nosotros sabemos que no estás bien desde hace mucho, y eso no te afecta solo a ti, sino a todos a tu alrededor y más que nada... Le afecta a Carl, todos tienen sus propios demonios, Rick... Pero los tuyos se están llevando a tú hijo contigo. No queremos perderte más, por algo que no tiene sentido, tú sabes que ese hombre no miente...- Se quedo callado esperando a que analizará sus palabras.

- No, yo sé que él miente...- Él mentía no había duda de ello...

- No. Tú sabes que él dice la verdad muy en el fondo...- Pauso.- Solo dale una oportunidad Rick...

- ¡Cuando me diga la verdad! - Dije exaltado, ¿cómo iba a darle una oportunidad cuando él mentía?

Hershel me miró serio por unos instantes y suspiro con pesadez.

- Rick, te lo pido por tu bien, solo trata.- Fue lo ultimo que dijo antes de desvanecerse en la tenue luz que alumbraba el lugar.

Me quede un momento viendo el techo hasta que la voz de Lori se hizo presente, una y otra vez llamándome.

- No es real.- Susurré más que nada para mis adentros.

"Rick..." suavemente me llamaba.
Yo sabía que aveces me metía tanto en mis pensamientos, en aquellos recuerdos de los momentos felices que tuve en esos días gloriosos donde no había nada a que temerle, que solo por esos momentos podía escucharla, podía hasta oler aquella comida casera tan bien preparada que ella hacia...

Cerré los ojos tratando de ignorar la voz al recostarme por completo en la cama. Aún el dolor era palpable, el dolor de haberla perdido.

Cuando me di cuenta aquella voz se volvía lejana hasta que deje de escucharla por completo, deje de escuchar cualquier ruido que pudiera estar en la prisión y me deje llevar.

- Rick... Rick...

- ¿Lori? - Susurré.

Abrí los ojos de golpe sintiendo mi corazón acelerado y mi respiración entre cortada. Me senté de golpe y comencé a tratar de regulariza mi respiración. Ya al estar más tranquilo vi hacia la puerta de mi celda y vi aquella tenue luz grisácea. Me puse de pie y me encaminé a la salida, hice la sabana blanca hacia un lado y salí por completo viendo la oscuridad de la noche en aquel frío pasillo.