Eres mi perdición

Parte 1 Sin Título

¡Hola!

Que puedo decir, soy nueva en esto!! Y también es el primer fic que publico.

Recuerdan la adolescencia y sus amores estudiantiles, que tiempos. Bueno este oneshot lo hice con ese fin, para recordar, y porque no con nuestra pareja favorita.

Aviso: Shingeki no Kyojin no me pertenece, son propiedad de Hajime Isayama

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Hoy es una de esas noches en que me siento nostálgico, donde el viento choca cálidamente en mi rostro y el silencio de la calle me hacen pensar en el pasado, en donde tú sales, en donde pude comprender que realmente ese amor que sentía por ti era solo una ilusión. En donde comprendí que ser joven es horrible y hermoso.

Porque ser joven... es ser libre y es cometer errores, y enamorarte, es uno de ellos.

¿Sabes...? Ahora, a mis veinticinco años, me pregunto si, sinceramente, fuiste mi primer amor.

Recuerdo aquella vez en la secundaria, cuando me pediste un sorbo de mi botella de agua, te lo di sin rodeos, ¿realmente estaba tan enamorado, como para compartir de mis salivas contigo? ¿Una persona quien, ni siquiera mi corto y simplón nombre sabía?
Bien recuerdo que me la devolviste, espere ansiosamente a que dieras media vuelta y fueras con los demás, me sentí estúpido y avergonzado porque una vez lo hiciste, tome de la botella sin pensármelo dos veces.

¡Dios! ¡Ese fue mi primer –por no decir, patético-, beso indirecto!,

Joder, te juro que no sé porque lo hice.

Ahora..., ahora detesto la saliva. Cuando mi hermana toma de mi botella, o cualquier persona bebe de los recipientes que me pertenecen sin mi permiso, acostumbro a botarlo, o bien, les permito que se lo queden. Se perfectamente que podría limpiar la boquilla, pero no dejo de pensar que eso es simplemente asqueroso.

¿Porque me lo pediste a mí y no a otro?, aunque tampoco te reclamó nada, si te soy sincero, me sentí muy feliz aquel día. El cómo retumbaba mi corazón fuertemente y mi cara tan roja que seguro parecería una tomate humano.

Aunque, sabía que no debía ilusionarme, y lo sigo sabiendo ahora. Esto paso hace años, y seguramente tú ahora ya ni un poco de mí recuerdas. Seguramente... ni sabes que fui tu compañero de clases.

¿Recuerdas el día del cumpleaños de Farlan? Yo lo recuerdo a la perfección, ¿y cómo no hacerlo?

Fue el día que se rompió mi corazón. El día que entendí el tipo de chico que eras. El día que me sentí tan frustrado

Era una de esas fiestas que parecían discoteca, estaba de moda ese tipo de decoraciones; con las luces apagadas y una esfera en el centro de la pista de baile, iluminando todo el lugar con muchos colores.

Realmente odiaba ese tipo de fiestas, pero fui más por obligación que por gusto.

Aunque estaba en parte ilusionado, pues sabía que ibas ir, y eso hacía retumbar mi corazón hormonal rápidamente.

¿Pero qué digo...? Por supuesto que ibas a ir, Farlan era tu mejor amigo, tu mano derecha, y fue por la simpe razón de tu presencia, que ese noche me propuse ir con mi mejor prenda, incluso le pedí a mi hermana que escogiera el atuendo que usaría por mí, no sabía qué tipo de ropa utilizaban en ese tipo de fiestas, o en cualquier tipo si soy honesto. Aquella noche mientras me arreglaba, me sentí muy avergonzado, porque ella sabía que me gustabas y se burló por lo nervioso que estaba.

Mikasa fue realmente malvada, no había dejado de molestarme, pero igualmente agradecía su ayuda, porque ni bien me vi en el espejo note que hizo un buen trabajo, ¿a quién engaño? Me veía perfectamente fabuloso.