Responsabilidades

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La mañana llego con una migraña horrible  para Even, sin recuerdos después del zigzagueo con sus amigos  antes de entrar a su casa reviso: Llaves, Teléfono y cartera. 

Chris estaba tumbado en el sofá, Liu y Armando fuera del baño, Jorge estaba recostado en su cuarto; Even tomo un par de pastillas para calmar el dolor de cabeza y comenzó a cocinar algo, extrañamente no puso música, el sonido de otra persona en casa le agradaba aunque solo fueran ronquidos.

El tiempo paso y uno a uno fueron despertando,  el desayuno casi estaba listo así que Even coloco los platos sobre la mesa y fue sirviendo; preparo algo de carne que tenía junto con algunos huevos. 

Mientras desayunaban, las risas no paraban entre los vagos recuerdos que les quedaban de la noche, mientras Even tomaba café noto que se habían quedado callados, al bajar la taza sus  amigos lo miraban con ansias.

Chris: -¿Y...? 

Even estaba fingiendo demencia - ¿Y...que?, ¿no estaban buenos mis huevos?-

Chris:- Sabes a lo que me refiero... anoche, ¿que paso con aquella chica...?
Una más a tu lista verdad (cara picara)-

Even:-pff... la veré el lunes en la escuela, y la invitare a salir como amigos, para conocernos mejor y esas cosas...-

El silencio inundo la mesa mientras Even seguía comiendo, Chris le sacudio las ideas de un golpe.
-Como que "como amigos"?...
Eres Tonto  o que te pasa?-

Even empezó a reír.
-Por algo se empieza no?, no quiero forzar las cosas, siento que ella es especial...-

Después de que sus amigos se retirarán, Even paso a tomar una larga ducha caliente; al terminar solo se recostó en el sofá hasta que fuera hora de ir a trabajar.

Al caer la noche su día comenzaba, el salio a la calle y empezó a caminar hacia el bar donde trabajaba los fines de semana. Su turno comenzaba a las 7:30 pm y terminaba a las 6:00 o 7:00 am, durante el camino pensaba en la excusa perfecta para su falta del día anterior.

Martín era el gerente y encargado del bar, un tipo sumamente delgado y mermado por las drogas y el alcohol.

Al entrar al bar las mesas estaban sucias al igual que toda la cristalería, Martín estaba fumando en la barra mientras miraba el reloj.
Even entro y se dio cuenta del desastre y antes de que si quiera dijera algo Martín lo interrumpió.

-¿Y? ¿Otra cita de una noche? - un tono molesto y con justa razón.

-Nop- algo risueño contesto Even.

-Dejame adivinar y... mientras que lo hago le darás una limpieza profunda al baño... Como castigo por faltar tan abruptamente ayer.- Sonriente saco los guantes de latex para esa nauseabunda tarea.

-Que más da, supongo que es justo - resignado tomo los guantes y un cubre bocas del botiquín médico.

Mientras que Even limpiaba los baños, Martín seguía "adivinando" la razon por la que había faltado.

-Entonces si no fue una cita de una noche fue... ¿La Tarea?-

-Pff... Buen intento, pero no.-

-Tenias¿ un terrible malestar estomacal y no podías salir del baño? -

-...?-

La madrugada había llegado y los clientes con ella, solo otra noche normal, algo de buena música guió a Even entre las mesas.

Había una pista de baile e incluso un escenario donde todos los fines de semana se presentaba una Dama de moral distraída con una hermosa voz. Ella daba shows los sábados por la noche, cantaba y convivía con el público.

Even llevaba una relación algo complicada con ella, era algo parecido a un "free", sin sentimientos de por medio no había presión.
La noche casi terminaba,  y mientras ella cantaba y jugueteba con su mirada a los espectadores, Even pensaba en que sería de esa relación ahora que el estaba sintiendo algo por Mia.

Cuando los últimos clientes salieron, Even los acompaño a la puerta de salida mientras que Martín comenzó a hacer el corte del día.

Even se despidió de aquellos ebrios alegremente, al fin tendría tiempo de descansar.

Se sentó en una mesa volteando a la salida mientras escuchaba los tacones acercándose.

Entro por la puerta una mujer delgada, de tes muy clara y cabello oscuro como sus intenciones, un vestido negro con encaje y tacones del mismo tono.

-Te extrañe anoche Even, ¿donde estuviste?- Dijo mientras lo abrazaba por la espalda.

-Tu sabes Mellani... Me perdi en el sendero de la vida.-  volteo hacia el techo.

Mellani acarició su pecho mientras le daba pequeños besos en el cuello que iban subiendo en intensidad.

-Y...en tu casa o en la mía?. - Su mano iba bajando por su abdomen hacia su pantalon.

-Hoy no, tengo cosas en que hacer, y estoy algo cansado.-
Even aun guardaba incertidumbre sobre lo que pudiera salir con Mia.

Mellani se sentó es las piernas de Even y empezó a mover su cadera.

-¿Seguro de que no quieres cambiar de opinión? Estoy buscando algo de medicina para mi dolor de cabeza, y creo que tu la tienes.- mantenía los movimientos y le susurraba en el cuello.

Even se levantó, y la apartó.
-Martín tiene medicina también,  pero veremos el siguiente fin de semana.-

Tomo sus cosas y se despidió de Martín y Mellani,  Even paro un taxi y tomo camino hacia su casa.

Una noche más durmiendo solo.

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⏰ Última actualización: Sep 08, 2017 ⏰

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