Trío: Genderbend

Esa alumna maravillosa (XiuKaiHun)

Sehun miró a su novia, la cual sonreía de manera pícara como siempre hacia esa alumna tan hermosa de último año de secundaria. Desde hacía unos meses, las dos comenzaron a sentirse atraídas por otra mujer, sin perder el amor y la pasión hacia la otra y, como debía hacerse, hablaron del tema, quedando después de una larga conversación en incluirla, tentarla primero, enamorarla y después tenerla.

Ella recordaba mostrarse en contra de la decisión de Jong In porque eran profesoras, las dos, y estaba prohibido ese tipo de relaciones con alumnos, pero la morena le aseguró que nadie tenía porque enterarse de nada. Al final, terminó cediendo porque era inútil engañarse a una misma, ella también deseaba algo con esa chica diez años menor que ellas dos.

Ah, esos diecisiete años estaban muy bien aprovechados, era el pensamiento de Sehun cuando veía el cuerpo de Minseok, la chica que las enamoró a las dos. Sehun recordaba sus diecisiete y aunque no tenía los pechos tan grandes como Minseok o Jong In, siempre se enorgulleció de tener unas caderas y nalgas perfectas – Oh, a Jong In eso la volvía loca –, pero Minseok era simplemente perfecta. Mientras que ella tenía buenas nalgas pero pechos no demasiado grandes y Jong In tenía pechos grandes pero poco culo, Minseok tenía las dos cosas a sus diecisiete años de edad, ya prácticamente desarrollada.

Oh, es que ese cuerpo era de infarto, era caliente y dios, cuanto deseaba verla desnuda.

Jong In solía quejarse de que al menos ella tenía más suerte porque al ser la profesora de gimnasia del instituto, podía ver a Minseok con poca ropa, sudada y jadeante – aunque del ejercicio – pero la morena era la profesora de inglés. Y bueno, sabían que la chica era lesbiana y es que al hacerse cercanas a ella, ésta un día se desahogó con ellas. Resultaba que quería decirles a sus padres sobre su sexualidad real y tenía miedo. Sehun recordaba ese día, cuando Minseok, que le iba mal el inglés, estaba en la clase de repaso con Jong in y ella estaba presente también. Verla llorar le partió el alma. Las dos la consolaron y le dijeron que tenía que ser valiente, que sus padres entenderían.

Efectivamente, entendieron.

Parte del plan, de hecho, era pasar mucho tiempo con ella para poder lentamente y con paciencia seducirla las dos, por eso, aprovechando que le iba un poco mal el inglés, Jong In le sugirió a la chica clases de repaso con ella y Sehun, aprovechando el talento que Minseok poseía para el baile y que ella misma sabía bailar – Y Jong in, que era una reina en ese aspecto aunque no se dedicó ni quiso dedicarse profesionalmente a eso – se ofreció a darle clases en privado porque Minseok quería ser profesora de baile y quería mejorar su talento.

Así, las dos solían pasar mucho tiempo con ella y después de varios meses, la confianza con ella era enorme.

-Lo has hecho estupendamente –Habló Jong In cuando Minseok terminó de bailar. Ella sonrió, feliz por el alago.

-¡Gracias! No sé qué haría sin vuestra ayuda... -Puchereó, como parte de su infinita ternura.

-No pasa nada, sabes que lo hacemos encantadas –Intervino Sehun, mirándola de arriba abajo, viéndola intentando recuperar su respiración, ligeramente sudada. –Tienes un gran talento.

Jong In se acercó por detrás de Sehun y la abrazó por la espalda, no dudando en mostrar aquellas muestras de afecto hacia ella delante de Minseok, porque aunque no decían nada, siempre quisieron mostrarle que ellas dos eran pareja, darle esa confianza, y Minseok lo captaba fácilmente, no era tonta. Sabía que ellas eran pareja, que su profesora de inglés y su profesora de gimnasia eran lesbianas y estaban juntas. A ojos de Minseok, eran la pareja perfecta; las dos hermosas, atractivas y llamativas, una de piel más morena, la otra de piel más blanca. Simplemente, perfectas.