Bonum est faciet

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Fue difícil, realmente insoportable para mi;
fui débil y lo admito, no debí mentir, pensé que todo sería mejor, pero al parecer cada día todo iba de mal en peor.

Me engañé y engañé mas de lo que puedan creer.
Caía y sufría, todo por esperar el sueño que hasta el fin de mis días yo añoraría.

Todo era malo, aunque ellos no lo hacían mal intencionados.
Buscaban mi bien, era lo que me habían mencionado.

Nunca me contemplaron, ellos me ignoraron y aunque se que que no fue así del todo, pero yo me sentía completamente abandonado.

Era privado de mis deseos, inmaduro me llamaban, tonto, despistado y desinteresado.. No era así.

Todo era negro, obscuro, ya no tendría que vivir esperando aquel desolador y triste futuro.

Sin dar aviso llegó, una luz carmesí, algo frío y hermoso. Ahora lo llamo mi historia sin fin.

Amor y rencor, aventuras y peleas, amargura y dulzura, todo lo que podría tener una buena historia.

Seguías conmigo, jamás lo hubiera creído.
Nunca antes pensé que esto lo podría haber vivido.

Todo cambió y empeoró, la luz carmesí ya no brillaba con tal fulgor y fuerza.
Ahora solo me podía cubrir con mi rojo, la tristeza.

Dudaste, lo se y entiendo.
Te distanciaste, también lo comprendo, pero no tenías que seguir si tu corazón no lo quería así.

Todo acabará, amor y personas cercanas.
No tendrán que seguir con esta persona, tan podrida y mala.

Algo corta y sin aviso es nuestra despedida, es lo mejor para ambas vidas.
No los culpo, así es este juego, la realidad es que solo siempre estuve aquí.

Me iré sin rencor alguno.
Bailen sobre mi tumba sin algún apuro.
Lo repito, fui débil, no supe controlar las cosas, preocupado estaba por lo que la vida me deparaba.

Tuve miedo, al futuro, a los problemas.
Ahora seré libre, ya no tendre que plantear mis escenas.

A donde vaya jamás olvidaré a lo que ahora y siempre llamaré mi historia sin fin, a ti. Quizá no fue nuestra vida, nuestro momento, quizá fue mi culpa y lo entiendo.

Esto continuará, algún día te volveré a soñar, te volveré a encontrar.
Tu frío me salvo y me hizo olvidar; esas manos, esa piel helada, esa sensación que jamás podre olvidar.

Eres y seras mi dulce nevada, fría pero dulce, complaciente a este cuerpo lleno de rojo cálido.

Tus ojos, azules, hacen juego con tu personalidad, con tu frialdad.
Eres diferente, quizá por eso te ame con tal locura, por la falta de amor y que ocasionó una cavidad en mi corazón.

Perdón por todo, lo malo, los errores; di siempre lo mejor de mi aunque quizá nunca lo valores.

Aquí acaba este capitulo de mi historia, aquella a que tu le diste seguimiento, sentimientos.
No tendré fin, mi amor por ti no tendrá fin.

Recuerdame como una rosa roja, ya arrancada de todo lo que podía tener; recuerda que tu me mantuviste frío, conservado, me diste vida aun cuando se veía mi muerte inminente.

Me rindo, perdí el juego.
Espero algún día poder tener la suerte de verte de nuevo.






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⏰ Última actualización: Dec 12, 2016 ⏰

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