Fina Prostituta

CAPÍTULO IV

El deseo o la obsesión que ese rostro provocaba  en mí, comenzaba a anotarse cada vez más y no sabia cómo controlarlo, sr. la persona que espera  está aquí dijo la voz de Peter al otro lado de la puerta. Llevarlo al despacho y en unos minutos bajo...

Soy el detective Albert Martí,  quisiera que me dijera todo lo que sabe de la persona  a la que quiere contactar  a través de mi servicio. Tomé asiento, quisiera tomar algo dije antes de comenzar, solo agua dijo y serví un poco de la jarra que se encontraba sobre la mesa del centro. Mi nombre es  Misael Jackson, la persona que busco no se como es no hay foto y tampoco su nombre.

No entiendo, entonces como es que quiere buscar a alguien que tal vez ni exista sr. Jackson. Hace unos días compre un cuadro y no estoy tan seguro,  pero tal vez esa mujer exista y yo quiero saberlo, entiende.

Me está diciendo que busque a la mujer de esa pintura, se da cuenta que solo pudo ser plasmada por la imaginación de su creador.

Yo pagaré por ello y si es es solo eso quiero saberlo igual, lo único que tengo y tal vez sirva es la firma de él, Carl  Dosson.

Quisiera ver la pintura y la nota  de la compra dijo y accedí a dar la información, en cuanto tiempo cree tener una respuesta. No lo sé, es algo inusual, de igual forma espero tener un adelantó en unas semanas, extendí una tarjeta con mis datos y lo acompañe  a la salida.

Lo que tenía no sirve de nada es como buscar una aguja en un pajar, el sr. Jackson sí que está loco, igual pagará por eso y tal vez más de lo que deba. Que tramas esta vez dijo su hermano, nada solo un loco que trata de buscar a una  mujer que vio en una pintura.

Tal vez se enamoro de un cuadro  y cree poder encontrar la, no lo veo tan descabellado dijo sarcástico.

Recuerdas algo de esa noche, en ese lugar dijo cambiando de tema  y aunque él no lo crea sé que quiere saber lo que paso conmigo, olvidas que soy detective y conozco muy bien un interrogatorio. ¿De qué hablas?... que si recuerdas como fue que paso, tratas de decir que si ella y yo lo hicimos... no lo creo, no olvides que  no es de caballeros hablar de eso.

¿Es raro? no crees, la forma que paso todo desde que llegamos, es como si hubiesen estado observándonos, luego la llegada de esa rubia a la mesa, los tragos de cortesía y después el llevarnos a ese cuarto cuando no lo pedimos, las reglas, todo un plan. Lo que creo Robert, es que los tragos no te hicieron muy bien, gozalo de eso se trata y ya es pasado, que igual si quieres más puedes volver.

Salí de ahí y lo que me dijo me sorprendió aún mas, o es que no recordaba que ellas dijeron que solo sería la única vez que las podríamos ver. Sabia que algo andaba mal en todo esto, pero ¿Qué tanto debía saber? tal vez por algo lo dijeron y no deba volver a ese lugar.

La noche llego y solo esperaba que mañana esto quedará olvidado...

Sus ojos claros como el agua aparecieron y unas palabras retumbaban cada vez más fuerte y claro "has me tuya" vuelve, vuelve, vuelve...

El alarma del despertador hizo dar me cuenta que solo era un sueño o tal vez una pesadilla, entre a la ducha para relajar me mientras llega el desayuno. Tome unos jeanes azul marino y una playera manga larga color guinda, tenis del mismo color y salí de la habitación con rumbo al comedor, donde seguramente ya se encontraba Albert para ir a la universidad.

Estudio el último grado de la carrera de administración al igual que él, por suerte no vamos en el mismo grupo, seria muy tedioso, él tiene una especialidad es por eso que trabaja como agente secreto, lo se por que a veces suelo ayudarlo, ser idénticos nos ayuda.

Esta noche iré de vuelta a ese lugar, ellas no pueden prohibir la entrada, lo decidí ya que no puedo dejar de pensar en lo que paso. El camino al colegio transcurrió de lo más normal, trate de sacar más información, pero fue inútil, esto lo tendré que hacer yo solo, tal vez resulte ser mejor detective que él, pensé entre risas.

Las horas dentro de la universidad nunca me habían resultado tan tediosas y es que toda la tarde estuve con la cabeza en otro lado, si los profesores decidieran hacer un examen de este día en especifico, estoy seguro que sería mi fin.

No quise salir con nadie después de la escuela, no había tareas pendientes, solo me queda esperar la hora y volver ahí.

Eran ya las diez de la noche y trate de salir de casa lo mas silencioso posible, tome las llaves del auto, di marcha para alejarme y tomar hacia mi destino.