Era viernes, y Jin se encontraba repasando su lista de cosas, al día siguiente se haría la posada del barrio (?) Y Jin era el encargado de ese año.
Levantó la vista y miró a su alrededor los pendejos de sus amigos estaban haciendo sus cosas cada quien, había aceptado mudarse a vivir con ellos nada más por lástima... Bueno, y también porque le gustaba NamJoon.
— ¡Haber pendejos, vengan acá!
Los llamó con delicadeza, haciendo que todos acudieran a su llamado, porque cuando mami Jin se enojaba tenía muuuy buena puntería con la chancla.
Se formaron como Jin los acomodó quedando del siguiente modo.
YoonGi → Jimin → Jungkook → NamJoon → TaeHyung → HoSeok.
De ese modo era como tenían cada quien que entregar lo que por parejas les tocó:
{ YoonGi y Jimin — Ponche }
{ Jungkookie y Nam — Dulces }
{ Hobi y Tae — Piñata }
— ¡Yoonmin! — Llamó Jin a la pareja que tenía delante, YoonGi hizo cara de "ew" y Jimin se sonrojó — A ustedes les tocó el ponche.
— Ajá, está en casa de la ñora de allá — YoonGi señaló la casa de su vecina, mientras Jimin asentía frenéticamente.
— Bueno, Kookie y Nam — Habló Jin con dulzura, mientras ambos chicos se acercaban a Jin con una bolsa llena de dulces, para ser exactos, la bolsa contenía más bolsas y en esas bolsas habían dulces.
— Perfecto... Hobi y Tae — Estos dos se acercaron tímidamente y con la mirada baja.
— J-jin, antes de que te enojes, todo lo que sucedió fue un accidente, la verdad es que nosotros no queríamos, bueno, si queríamos pero no la vimos, y luego ibamos a ir, pero ya no fuimos — Habló TaeHyung rápidamente.
— No entendí nada — Musitó Jin con el entrecejo fruncido.
— Los idiotas rompieron la piñata — Ayudó YoonGi desde detrás.
El caos se desató en la casa de aquellos siete chicos; algunos vecinos pensaron que era el fin del mundo, otros que Satanás iba a castigarlos por todos sus pecados. La iglesia de la colonia se preparaba para los excorcismos; todo por los gritos que de aquella casa provenía.
— ¡EXPLIQUENME, PAR DE IDIOTAS, ¿CÓMO QUE ROMPIERON LA PIÑATA?! — Jin transformado en un demonio cuestiono mientras detrás de él se encontraba un YoonGi con una mano roja marcada en la mejilla, un Jimin despeinado y llorando, un NamJoon que dijo iba por cigarros, un Kookie en la orilla de la casa rezando mil padres nuestros, y un Hobi en el suelo, junto a un TaeHyung rojo de tanto gritar.
— Pues es que... Estabamos jugando a la mamá y al papá, así como luego tú con Ramón, y luego Hobi me hizo cosquillas, y pues... Se rompió.
