En la oscuridad

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Terremotos,tsunamis,tornados,maremotos,pestes,tormentas eléctricas,lluvias ácidas,sequía,eso es lo que el calentamiento global había logrado.
Muertes.
En el último mes,los científicos descubrieron un virus llamado Heriotza,que te consume por dentro.Es una enfermedad que vuelve locas a las personas, convirtiéndolas en salvajes y fuera de sí. El virus es muy fácil de contagiarse porque se propaga por el aire.
Comenzó en Rusia,llegó a Europa,y se movió hacia África.
En Estados Unidos,las personas no salían a ningún lado.En la zonas costera, sólo había ciudades fantasma.Los constantes tsunamis hacían imposible vivir alli.
Las personas se mataban entre si por una rodaja de pan.Los medicamentos se acababan.Los hospitales se llenaban y el ganado moría.
Hace unos meses mi madre y mi hermana menor se mudaron al centro del país,donde el hambre y las urgencias aún no eran tan constantes.
Yo vivía en un departamento abandonado,en el centro de Manhattan.
Un día escuché un grito proveniente de afuera.En un callejón,unos hombres intentaban robarle a una chica.
Bajé a ayudarla.Cuando me vió,le hice una seña para que no hablara.Tomé un palo y los golpeé por la espalda.
-Gracias...-dijo la chica dudosa.
-No deberías salir,es muy peligroso-dije seriamente.
-Lo sé,pero tenía hambre- señaló una bolsa que tenía frutas dentro- ten- me arrojó una manzana y le dí un mordisco.
-Soy Dylan Smith- Dije cuando terminé de masticar.
-Alexa Bakay,un gusto conocerte -se dió media vuelta y desapareció entre los edificios.
Me quedé parado sin ser conciente del peligro de estar afuera.
El sol de media tarde se asomaba, y una luz me encandiló.Una pequeña pulcera estaba tirada en el suelo,la levantéy ví que tenía un grabado en uno de los dijes, "¿Confias en mi?"

La guardé en mi bolsillo e hice un paso para adentrarme en el edificio.
Pero no pude.
Me taparon la cara y no podía ver nada,comencé a patear a ciegas,pero fue en vano.
Lo único que sabía, era que estaba en una camioneta.
...
Luego de horas,al fin vi la luz,pero hubiese preferido no hacerlo.
Había muchas personas que,al igual que yo,estaban desconcertadas.A lo lejos,ví dos rostros familiares.
-¿Emily? ¡EMILY! ¡MAMÁ! -grité mientras unos hombres me tomaban de los brazos para ponerme en una camilla.
Me pusieron una inyección y lentamente mis ojos se cerraron,lo último que vi fue a una chica al lado mío,llorando y gritando.

Desperté y me encontraba en una habitación oscura y sucia,una sola puerta con rejas que daban a una escalera,con unas 20 personas,casi todas llorando.
Metí mis manos en mis bolsillos buscando la pulcera,y ahí estaba.
Me levante lentamente,mi cabeza dolía y no entendía nada.
-Somos ratas de laboratorio.
-¿Qué?
-Somos ratas de laboratorio -repitío un señor -los europeos pagaron billones para que los científicos estadounidenses encuentren una cura.
En ese momento,las rejas se        abrieron dejando ver a un hombre con armas.Empezó a tomar personas al azary llegó hasta dónde me encontraba.
-¿a dónde nos llevan?-pregunté firmemente.
-Te encantará-respondió con diversión.
Me colocaron un collar que en el lado de adelante,tenía el código
Desde ese día,lo único que recuerdo es dolor.
Experimentaron con gemelos,para ver si el cuerpo humano podría ser manipulado de forma antihumana.
Experimentos con heridas en la cabeza, un niño de once o doce años fue atado a una silla para que no pudiera moverse. Sobre él, fue suspendido un martillo que cada pocos segundos caía sobre su cabeza.
Hacían trasplantes de una persona a otra,a veces,no utilizaban anestesia y las personas agonizaban además éramos ramos tratados con varias drogas.
Un grupo de 90 personas fue privado de alimentos y les daban sólo agua de mar para beber, dejándolos gravemente lesionados.Estaban tan deshidratados que lamían el suelo recién lavado para obtener agua que pudieran beber.
Lo que hacían en ese laboratorio,lo que me hicieron,fue deshumanización en su grado máximo,sólo por dinero.
El dolor nos mantenía vivos.El virus dejaba de existir por unas horas,pero siempre volvía.
Luego de dos semanas de sufrimiento,llego la prueba final.Nos colocaban cables en la cabeza y simulaban heridas de todo tipo,pero se sentían reales.Eran tan reales que te mataban.
No pude resistirlo y me desmayé.Desperté en un especie de bote enorme,había un olor horrible,giré mi cabeza y vi a un hombre muerto.
Me levanté lentamente y debajo de mí,había cientos de cadáveres,las personas que murieron durante la última prueba.
De pronto caía hacia un río,estaban arrojando los cuerpos allí.Me ahogaba,eso era lo que sentía,y llegaron las rocas.
Una fue directamente a mi cabeza,y fue ahí cuando todo terminó,cuando supe que alguien mas había hecho Jake Maté.
Desperté lentamente,tenía un dolor de cabeza muy fuerte.Me encontraba en una casa vieja,sobre una cama.Tenía una herida profunda en el abdomen,cubierta con una gasa.
-Tranquilo -escuché una voz y miré en esa dirección,la chica de melena castaña me miraba atentamente con sus ojos color café- soy Alexa ¿recuerdas? la chica de la manzana.
-Sí,te recuerdo -dije reacomodándome en la cama.
-El golpe que tuviste fue fuerte,para tu fortuna,mi madre me enseñó demasiadas cosas, era enfermera -dijo mientras enrollaba unas gasas.
-¿Era? -pregunté.
Ella se detuvo y respondío mirando al suelo
-Sí,era- dijo guardando la gasa en el botiquín.Me levanté y busqué una salida.
-Eso no es buena idea -dijo Alexa.
-¿Por qué? -pregunté incrédulo.Ella encendío un televisor y pude ver que ahí estaba yo.
-Te buscan,supuestamente,quemaste la fábrica en donde guardaban los últimos medicamentos que quedaban,todos te odian.
-¡Pero yo no lo hice! -grité.
-Lo sé -dijo Alexa desinteresada.
-Y ahora todos me quieren matar.
-Eso tambien lo sé.Pero te voy a ayudar.
-¿Ayudarme para qué?
-Para esconderte.

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⏰ Última actualización: Dec 16, 2016 ⏰

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