[SKATER BOY] RiLen

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Luego del ridículo que había hecho, se dirigió a sentarse en uno de los asientos, específicamente en el último donde casi nadie se sentaba. La clase comenzó como cualquier otra, lo interesante de esta era la manera en cómo el profesor explicaba. Se notaba que este le ponía mucho empeño a su carrera lo cual le agradaba puesto que ahora en la actualidad la mayoría de los educadores no ejercen la misma dedicación como lo hacían antes.

Mas la mirada hacia su amada lo distrajo rotundamente haciendo que sus pensamientos se disipasen. Otra vez el latir de su corazón empezó a causar ese sentimiento. Sólo suspiró, se sentía muy confundido, pero eso no significaba que aquel sentimiento le disgutase. Solo se dedicó a prestar atención a la clase.

(....)

Lo miré y sentí el sonoro de mi corazón latir, jamás creí que esto me pudiese pasar y más aún a una persona como yo, pero si este es un mensaje para mi felicidad lo aceptaré.
Sin duda alguna aquel rubio me cautivó, me hubiese gustado saber de él o al menos su nombre, mas lo molestosos de mis amigos no lo dejaron presentarse. A veces odio la manera en como se comportan, pero supongo que no puedo hacer nada después de todo son mis amigos.

Cuando la hora de clase terminó pensé en acercarme al nuevo estudiante, pero lamentablemente mis amigas no me dejaron. Fuimos a la cafetería donde nos encontramos con los demás de nuestros compañeros y/o amigos, puesto que algunos de ellos no los conocía.

La verdad a lo largo de que pasaba los minutos me empecé a aburrirme,
Hasta que lo vizualicé a aquel rubio de nuestro salón. Parecía muy confundido y tratando de buscar un lugar para sentarse, entonces, me aparté un poco dejando un pequeño lugar a mi costado y así después llamar su atención, pero fue ocupado por otra persona.

- Gracias Neru-san  por el sitio  - dijo una pelirroja con peinado en forma de taladro- Ya estaba perdida sin encontrar uno.

- No hay de qué, Teto-chan - La rubia se encontraba un tanto molesta porque aquella amiga le había arruinado un acercamiento hacia el pelirubio.

- Oigan ese no el idiota de esta mañana - Pero al parecer esto le molesto aún más .

- les parece si le jugamos una "pequeña bromita" - Las sonrisas aparecieron en cada uno de ellos lo cual dio inicio al pequeño espectáculo que se armara en pocos segundos.

- bien... - y con ello se dirigieron un pequeño grupo de tres personas alrededor del rubio.

- Esto se pondrá bueno,¿no lo crees? - una peliverde y su mayor confidente le susurró a algo que le disgustaba en todo el sentido.

- supongo...- dijo en un casi inaudible sonido.