— Sasori–Sama —Sakura lo llamo, este la voltio a ver.
— Vete a entrenar — Sasori le ordenó, Sakura hacentoo, hizo una reverencia y se retiro a entrenar. Sasori miro como ella se iba, hace cuatro años que el la había capturado, hace cuatro años que el la entrenaba para que ella se convirtiera en su marioneta perfecta, hace cuatro años que la rosada no volvía a Konoha, Sasori en todo ese tiempo siempre fue exageradamente estricto con la Haruno en cuanto a sus entrenamientos se refería ya que cuando el decida que ella estaba lista para convertir se en una marioneta el lo haría realidad, el hizo cambiar drásticamente a Sakura en cuanto a su personalidad se refería, sus ojos estaban carentes de brillo, ya no mostraba sus emociones tan a menudo, y eso de cierta forma le dolía al pelirrojo, ya que el ya se había acostumbrado a los gritos de la Pelirosada, el no sabia el por que, pero el temía que estaba empezando a sentir cosas por la Pelirosada.
¿Eso era posible?
¿Una marioneta podía sentir?
¿El se podía enamorar?
Suspiro pesadamente y se dirigió a ver a la Pelirosada, camino por el escondite en el que se encontraban ellos dos, vio a Sakura, esta estaba entrenando con una Katana, Sakura manejaba con mucha delicadeza y Presicion la Katana, daba golpes al aire como si estuviera en una batalla. Sasori observaba cada uno de sus movimientos, miro su cuerpo y noto que había cambiado, sus curvas estaban marcadas, sus piernas largas, su piel blanca cual nieve y se miraba tan suave, sus labios color rosa pálido, gruesos se miraban apetecibles, en pocas palabras Sakura se había vuelto una mujer Hermosa y muy sexy ala perspectiva del integrante de Akatsuki.
—"¿Que carajos? , por que demonios estoy pensando eso de esa niñita "—
Sasori, negó levemente con la cabeza, tratando de borrar esos pensamientos que seguramente una marioneta como el no debería de tener.
—Sasoria–Sama —Sakura se acerco donde el.
—¿Se encuentra bien?—Sakura le preguntó con un tomo de notable preocupación y que el pelirrojo había estado actuando muy raro en los últimos días.
—No me pasa nada —Sasori voltio al cielo y vio que una ave de arcilla se ha cercaba a ellos.
—Deidara, que querrá —Sasori dijo viendo como el ave se posaba en su mano y entregándole un pergamino, el Ave se retiro después de eso. Sasori desplegó el pergamino y empezó a leerlo.
—Niñita Me tengo que ir, regresare en unas semanas — Sasori dijo para luego darse vuelta y desapareciendo de los ojos de Sakura.
— Tenga cuidado —Sakura dijo susurrando para si misma, cuando sintió que el pelirrojo ya se había ido se dejo caer en el césped, y miro al cielo, el siempre se había dirigido a ella como
“Niñita”, a ella no le importaba ya que ella lo tomaba como un apodo de cariño, desde hace como un año ella empezó a sentir cosas por el Pelirrojo aunque ella no lo quisiese admitir, ella ya no le importaba tanto Konoha, ella misma se recriminaba al pensar en Sasori como en una forma amorosa.
¿Uno escoge de quien se enamora ?
¿Uno puede decidir no amar a la persona que uno ya ama ?
¿Amarlo a el esta mal ?
—Sasori–sama —de los ojos de Sakura salieron unas lagrimas traicioneras, se las limpio la lágrimas cuando escucho un estruendo, se levanto rápidamente cogió la Katana y se dirijo a ver.
—¡Sakura–Chan! — Un grito resonó en todo el escondite, Sakura paro drásticamente, ¿Naruto estaba ahí?
¿Emboscaron a Sasori?
Seguramente ya que de otra forma no pudieron encontrar el escondite.
—¿Sakura–Chan? —Sakura se volteo y vio a Naruto, este estaba llorando y sin mas se dirijio hacía ella y la abrazo, Sakura soltó la Katana y dudo por un momento en corresponderle el abrazo pero lo hizo.
