19 de noviembre.
Lunes, 7:20AM.
Dylan. - dijo una voz que conocia desde hace casi dieciséis años, Drake - Vamos, tenemos que ir a la escuela. - dijo insistente, moviendome de aquí para allá.
Cinco minutos más. - dije, revolviendome entre las sábanas, ya que ayer nos dormimos tarde porque vimos una película con Maya y mis hermanos, luego Catrina la llevó a su casa a eso de las 3:00, le dije de quedarse a dormir aquí pero me dijo que su abuela está mal de salud y que quería pasar tiempo con ella.
Siempre dices lo mismo y terminas durmiendo un día entero. - dijo con esa tipica cara burlona que tiene el y que tanto me fastidia. - ¿Quieres que te tire agua? - dijo y abri los ojos de inmediato, conociendolo me tiraría orina, claro que lo haria, después de todo es Drake.
Ok, ok. - dije levantandome y dirigiendome a mi propio baño. - Perra - Dije por lo bajo, yo lo consideró una pequeña perra a pesar de que sea más alto que yo, le sacó un año.
Lo se, lo se. - dijo moviendo muy exageradamente sus manos, reí ante su acto, la Drake diva se presentó, siempre se presenta.
Me di una ducha rapida y fria, cepille mis dientes y salí. Me vestí con un jean negro y una remera negra con un sweter que decia OBEY. Fui a la sala, encontrandome con todos mis queridisimos y hermosos hermanos desayunando. Mamá trabajaba a está hora, ella se va a las 7:00am, ella trabaja en un hospital, siempre pienso que trabaja mucho. Catrina también trabaja ayuda a mamá con los gastos, tampoco somos una familia pobre, pero grande no hace mucho dejamos de vivir con la abuela, nuestros tíos y primos. Habíamos empezado a vivir con ellos ya que papá había fallecido en ese entoces, así que habian decidido superar esto juntos.
¿Vamos? - pregunte, aunque era más que nada era una afirmación.
¿No vas a desayunar? - preguntó Sam, concentrada en su cereal. ¿Desde cuándo se preocupa por mí? Definitivamente ésta loca, o eso asumo yo.
Saben que hora es ¿Verdad? - dije, Sam miró su celular y Catrina su reloj, abrieron sus ojos como platos y fueron a buscar sus cosas, estan muy locos, aún así los amo, después de todo son mis hermanos y los que me apoyan en cada decisión que tomo.
Somos cuatro hermanos Candice; Sam; Drake y yo. Vivimos en una casa de dos pisos, arriba estan las cinco habitaciones y un baño que le pertenecía a mi habitación, si me envidiaban por eso. Pues Candice es la mayor con casi veinte años a está le sigue Sam de dieciocho, luego yo de diecisiete y Drake de casi dieciséis Y mamá de cuarenta y uno, papá ahora tendría cuarenta y tres.
Los chicos bajaron y nos fuimos en el auto de Catrina. Entramos a la escuela, menos Candice, ella iba a la universidad que según ella tanto amaba, notese mi sarcasmo.
Nos vemos luego - salude con la mano y mi tipica sonrisa, ellos hicieron lo mismo y fueron a sus clases.
Me fui a mi clase de historia, la cuál amo y ahí estaba Jaden, el chico por el que todas babean, pero yo creo que es muy estúpido, ya que todas buscan hombres atractivos y yo que prefiero inteligentes, sacados de libros, en fin.
Fui a sentarme, mire hacia todos lados buscando un asiento, ya que el mio había sido tomado por Billy Jefferson, por desgracia el único asiento era al lado de Jaden, mi persona favorita, la cuál amo tanto, aún asi me sente, el idiota ni se percató de mi presencia y eso que nos hemos sentamos juntos en otras clases, pero que se va a esperar de este chico, ni siquiera entiendo como pasa de curso y ahora está aquí.
Wow, me perdi en mis pensamiento, otra vez. Ni me percate de que el profesor habia llegado, cada día estoy más loca, me parezco a Sam.
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¡Te Odio!
Teen FictionDylan, una chica con nombre de hombre. Jaden, un chico que lo tenia todo a sus pies. Una historia algo cliche.