Cap 1

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Heim, se levantó un poco más temprano para llegar a sus obligaciones diarias que para su mala suerte se habían incrementado al menos durante seis meses.

Aron, corría desesperado las dos cuadras que le faltaban para llegar a su primera clase que para su terrible suerte comenzaría a las 6:30 am, muy temprano para su parecer pero, nada podía hacer, así que su corazón se salía de tanto esfuerzo que hacía, ya que por su falta de ejercicio físico era imposible que lograra resistir tanto.

A las 6:45 am, se logró encontrar frente a la puerta de su aula de clases. Un verdadero desastre.

Nadie sabía quién era este nuevo docente, el anterior se había jubilado justo el semestre anterior por lo que le tocaría recibir clases de este a quien nadie conocía y daba su catedra más importante para terminar su carrera, se armó de valor y trato de regular su respiración con un gran suspiro mientras dio tres fuertes toques a la puerta, unos pasos le alertaron que alguien se acercaba hasta que la puerta se abrió mostrando a un hombre joven muy atractivo visiblemente más alto que él, a pesar que él era alto le sacaba una cabeza de ventaja le dio una severa mirada reprobatoria y simplemente dijo un seco – Pase-, solo hizo lo que dijo sin decir nada, se sentó en el primer asiento que vio.

Al fin llegó la hora del almuerzo, su día había sido terrible, llego tarde a su primera clase el primer día aunque no fue el único y probablemente ni mitad de la clase se encontraba. El nuevo profesor el Dr. Heim, al final los regaño a todos y los tildo de irresponsable y algunos subjetivos más que en realidad no puso atención hasta que atrajo la atención de todos cuando anuncio una prueba de esa clase para la siguiente clase es decir, el próximo lunes y nadie al parecer tomo apuntes, y para su pesar sus libros guías para esa catedra incluían tres que eran imposibles leerlos en solo 7 días cuando nuevamente les tocaría recibir esa clase que tenían además, que sus horarios de por sí ya estaban tan copados, agregándole el terrible carácter y las amenazas que les dio a todos y que claramente al final lograron intimidar con sus métodos que ya nadie usaba.

¿Porque simplemente no les dio su clase preparada y ellos estudiaban?, así se ahorraban tanto lio de disgustos pero, indudablemente nadie se atrevió si quiera a pedirle su presentación.

Sumándole a eso le toco la rotación más pesada y sus más cercanos terminaron en otros grupos y con lo difícil que era para él acercarse a nuevos chicos en realidad dudaba que tendría un amigo cercano esos meses, solo tendría que soportar un poco más para al fin empezar a trabajar en lo que siempre le gusto aunque en realidad le faltaban unos años más incluyendo su internado, rural, residente, posgrado aún tenía que estudiar 8 años más aparte de esos 5 años para llegar a ser cardiólogo por lo mínimo.

Hiem se había enojado desde muy temprano, a él le costaba levantarse por eso empezaba su trabajo a las 10 am generalmente, había logrado cuadrar su horario y hacer espacio a su agenda para dar clases los lunes, desde las 6:30 am hasta las 10 am, para luego ir a dar consulta.

También se encargaría de 4 alumnos a los cuales tendría que guiar en prácticas de cirugía cardiotorácica durante los próximos 6 meses pero, eso lo arreglaría después ya que estaba tan furioso con esos pocos mocosos humanos que le ignoraron tan descaradamente en su clase cuchicheando entre algunos o con sus móviles navegando en la red, mandándose mensajes en fin cosas que no entendía, él no recordaba que se comportara así a su edad aunque tan viejo no se veía o era apenas cumplió sus 32 años y eran tan diferentes.

En esos momentos era donde más extrañaba su hogar al cual no había regresado desde hace 12 años.

En su clan se pelearían por besar sus pies y obedecerían cualquier orden a pesar de ser totalmente absurda.

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