Leah aún me miraba esperando una respuesta por mi parte, pero yo no era capaz de procesar el hecho de que era ella quien estaba frente a mí. ¿Cómo llegó hasta aquí? ¿Y qué es lo que busca?
-¿Camila?.- Me nombró para sacarme de aquel trance en el que había caído. Sacudí mi cabeza tratando de aclararme.
-Yo....¿Qué haces aquí?.- Pregunté sin más vueltas yendo directo a lo que me importaba.
-He venido para charlar contigo. Sé no nos conocemos ni nada de eso, pero me gustaría aclarar algunas cosas acerca de mi vínculo con Lauren.- Dijo con cautela tratando de descubrir mi reacción- ¿Podemos hablar?
Miré hacia adentro escuchando la charla que mis padres mantenían mis padres en la sala, y luego asentí en dirección a la rubia dándole una señal para poder charlar fuera de la casa.
-Te escucho.- Aseguré mirando al suelo de brazos cruzados.
-Tal vez mal interpretaste lo ocurrido hace algunos días. Pero quiero que sepas que aunque sí me siento atraída por ella, jamás intentaría hacer algo.- Comenzó a hablar llevándose toda la atención de mi audición- Eres su mate y no se puede competir contra eso.
Mi impresión aún era evidente y estaba buscando las palabras para saber qué responder ante lo que ella acababa de decir. Me presionaba con la mirada en la cual pude notar la sinceridad de sus ojos, además de que su corazón iba a un ritmo normal. Ella no mentía.
-No era necesario que vinieras hasta aquí para explicar la situación. Lauren lo hizo aquella noche y confió en ella.- Dije muy segura de mis palabras- Sin embargo, agradezco tu sinceridad.
-Es importante para mí no causar problemas a Lauren, ella es una chica increíble. Tienes mucha suerte.
-Si que la tengo.
...
Recostado contra el costado del auto esperaba pacientemente a que Emily apareciera entre todos aquellos adolescentes que abandonaban el instituto exhaustos. La castaña miró en todas direcciones entre un grupo de personas y sonrío ligeramente cuando me vio.
-Hey Em, ¿Cómo estuvo tu día?.- Besé su frente en forma de saludo.
-Pues aburrido con todas las clases.- Se encogió de hombros subiendo en el coche cuando le abrí la puerta.
-No seas exagerada. Debe haber alguna materia interesante.- Comenté poniendo en marcha el auto y comenzando a conducir.
-Soy buena a la hora de los deportes.- Mencionó.
-Por supuesto. Tienes ventajas por sobre los demás, velocidad, fuerza y mayor resistencia. Y ni hablar de los reflejos.
-Puede que me aproveché un poco de aquello.- Afirmó pensativa haciéndome reír.
-Eres increíble.
Nos pasamos el resto del trayecto charlando acerca de las muchas ventajas que ella tenía frente a los demás adolescentes de su edad y ella pensaba en cómo podría beneficiarse.
Cuando aparqué fuera de casa vi la patrulla de Alec fuera y me pregunté qué estaría haciendo aquí. De seguro mi padre y él están hablando acerca de la despedida de mi novia y yo.
-¿El oficial Cabello está aquí?.- Preguntó confundida Emily y luego me miró divertida- Estás en problemas.- Canturreó bajando del coche.
