Innocence »Shawn Mendes

04. "Kisses"

Corrí escaleras arriba dejando a Shawn con su enojo abajo. No podía creer que no me dejase siquiera salir una noche con mis amigas y usar el atuendo que yo quisiese, es totalmente injusto.

Pareciera como si desconfiara de mis sentimientos por él y fuera a buscar a otro quien me complazca, lo cual el sólo pronunciarlo me da fatiga. Yo amo a Shawn y él es más de lo que yo quise, no puedo creer que esté haciéndome esto. Me sentía como si miles de cuchillos me apuñalaran, me sentía dolida y no sabía qué hacer.

No quería darle el gusto a Shawn, pero quería decirle que lo amo y que no sería capaz de hacerlo o... Ir a la fiesta y demostrarle que no quiero estar con nadie más, pero creo que la mejor manera de demostrárselo es diciéndolo a él, ahora.

Volví a bajar las escaleras apresurada y al llegar a su fin, pude divisar a Shawn, sus manos estaban apoyadas en el mesón de la cocina y su mirada estaba gacha, podía ver como presionaba sus musculos, estaba demasiado enfadado y de repente me corrió un miedo inmenso acercarme a él pero... Debía hacerlo.

—Shawn —susurré acercándome a su lado, colocando mi mano sobre la de él, estaba demasiado tenso y mi mano estaba muy fría comparada con la de él —Quiero dejar cosas en claro...

—No puedes hacerme cambiar de opinión —habló entre dientes mirándome de reojo y levanté una ceja.

—Oh, es decir que no puedo cambiar tu desconfianza hacia mí y que tampoco puedo cambiar que pienses que puedo ser tan perra como para ser infiel —dije cruzándome de brazos y él pareció tensarse más, a lo cual le resté importancia, la molestia que sentía en estos momentos era irremediable.

—Es decir, que no confío en que puedas ir a esas fiestas tan grandes y alocadas —resoplé por su manera de exagerar las cosas —Yo solo quiero protegerte, pero como siempre, nunca quieres hacerme caso y a fin de cuentas vienes a decirme que tengo razón, Kyara.

—¡No siempre tienes la razón! —exclamé sin parar de mirar sus ojos furiosos —No soy una niña, sé cuidarme sola, lo que es algo que tú no entiendes.

—¿Crees que soy estúpido? No eres una niña, pero tampoco tienes la capacidad suficiente como para ir allí, ¿no entiendes? —se acercó aún más a mí, buscando algo en mi rostro que no sabía ni qué era.

—Tú solo no quieres que salga, ¿por qué eres tan egoísta? —las lágrimas ansiaban por escapar de mis ojos, mientras yo luchaba por no romperme a llorar.

Me frustraba que Shawn no llegara a entender esto, que no me llegase a entenderme a mí, ya ni siquiera sabía qué era lo mejor, ni tampoco sabía si mis ganas de asistir a aquella fiesta continuarían en pie.

—¿Soy egoísta por querer lo mejor para ti? —colocó su mano derecha en mi mejilla y por un momento quise apartarla, pero me volví débil por su tacto, por la forma en la que acariciaba aquella zona con su pulgar transmitiéndome tal tranquilidad, haciendo que mis gestos se relajaran de sobremanera —Kyara, no quiero que nada malo te pase, quiero que estés bien y si te estoy diciendo esto, es para que luego no llegues lamentándote por cualquier cosa que suceda.

Asentí cabizbaja y mi molestia se eliminó tan rápido que no quise perder mi tiempo sorprendiéndome por aquello. Sus ojos me miraban preocupados y su tacto en mi mejilla no se apartó en ningún momento. Comencé a creer que Shawn tenía razón, me puse en su lugar y, si él fuese quien quisiera ir a una fiesta como esta, ya yo hubiese trancado todas las puertas y ventanas de la casa con tal y él no saliera.

Sin más preámbulos, envolví mis brazos alrededor de su cintura, atrayéndole suavemente a mí y unas pocas lágrimas escaparon de mis ojos. Él no tardó en corresponder a mi gesto, abrazándome sobre mis hombros y dejando un beso en mi cabeza.

—Lo siento, yo...

—No digas nada, Ky —susurró contra mi cabello, el cual comenzó a sobar con cuidado. Me separé de él para mirar sus ojos, él sonreía relajado, ya no estaba molesto y eso me ponía feliz. Creo que preferiría pasar una noche de películas con él.

Sus manos volvieron a mis mejillas y las acarició suavemente, cerré mis ojos dejándome llevar por la suavidad de sus dedos y los abrí fijando mi vista nuevamente en sus ojos, estaban tan preciosos y brillantes como siempre, no podía abstenerme a momentos como estos, era lo mejor que podía existir, lo mejor que podía pasarme, era él.

Su frente se juntó a la mía y ya podía sentir nuestras respiraciones mezclarse, solo hasta que sus labios llegaron a los míos de una manera suave y lenta. Jamás me cansaría de que él creara momentos como estos.

Y sin siquiera yo misma esperarlo, empujé a Shawn de la cocina entre besos, los cuales fui haciendo más rápidos yo misma. Sus manos viajaron hasta mi cuello, atrayéndome más a sus labios y este se vio interrumpido cuando hice que él quedara a horcajadas sobre mí. Sus ojos me miraban sin poder evitarlo, y su sonrisa tan provocadora me saludaba. Rodé los ojos por su lentitud, tomé el cuello de su blusa en un puño y con fuerza lo atraje a mi nuevamente, haciendo que quedara apoyado sobre sus codos para no aplastarme. Él gruñó y mordí mi labio besándolo de nuevo.

Sus labios se movían suavemente sobre los míos, quería hacerlo relajante, ambos estábamos cansados de pelear, ¿y qué mejor que esta situación para compensarlo?

Mis manos se dirigieron a su cabello, acariciándolo suavemente y pude sentir como se estremecía. Necesitaba esto, necesitaba este momento y muchos más iguales a este.

—¿Sería mucho pedir que todas nuestras discusiones terminaran así? —preguntó cuando nos separamos un poco, besó mis labios una vez más.

—Estuve a punto de pedírtelo —reí acariciando su mejilla, él sonrió y lo empujé, a lo que él quedó recostado al montón de almohadas que adornaban nuestro sofá, me situé encima de él, dejando un corto beso en sus labios, que se convirtió en muchos más. Shawn se separó de mí y colocó un dedo sobre mis labios para que no volviese a besarlo. Fruncí el ceño confundida.

—Y otra cosa, ¿podríamos estar toda la noche así? —me miró suplicante y reí nuevamente.

—Por supuesto que sí —respondí y en menos de dos segundos ya Shawn había capturado mis labios de nuevo.