(Alexander)
Es temprano cuando llego a la empresa la mañana siguiente, dormí muy poco preocupado por Lena… En los dos meses que ha estado trabajando para mi nunca se ha enfermado, mucho menos faltado al trabajo. Así que después de estar por más de 15 minutos mirando como un idiota decidí dejarlo y darle la tranquilidad que seguramente necesita.
Entro en la oficina y me sorprendo cuando no veo a Lena allí, ella siempre llega antes que yo.
Aunque es sábado, no se supone que estemos aquí… Le había dicho que viniera porque teniendo cerca la presentación para obtener la cuenta Ford debemos trabajar un poco mas.
La llamo a su celular y me envía directamente al buzón raro… Pero seguro que en cualquier momento ya llega. Una hora y media después ella todavía no esta aquí ¿Dónde podrá estar? Vuelvo a llamar a su teléfono varias veces pero en todos los intentos me envía al maldito buzón de voz, entonces decido llamar a su casa, el teléfono suena por varios minutos pero ella no contesta.
Es todo no voy a esperar mas, le marco a Jhon para que me venga a buscar, no es normal que Lena falte al trabajo y que no conteste ninguno de sus teléfonos ¿Y después de que ayer se fuese por que se sentía mal?... Bueno estoy preocupado.
Entro en el auto y le pido a Jhon que me lleve lo más rápido que pueda al apartamento de Lena.
En el camino yo sigo intentando con los teléfonos pero nada pasa y no me gusta, yo solo tengo un mal presentimiento. Tardamos muy poco en llegar, cuando lo hacemos me bajo rápidamente del Rover y camino hacia la entrada.
Cuando estoy por llegar a las puertas el portero me detiene.
-Buenas tardes señor ¿En que puedo ayudarlo?.-
-¿Se acuerda de mi? ¿Hace unos días vine a buscar a la Srta. Cabani?.- Le digo con urgencia.
-Seguro, me acuerdo de usted.- Dice el hombre todavía sin dejarme entrar, Joder que cada segundo cuenta.
-La Srta. Cabani es mi asistente, tenemos una reunión importante y ya vamos tarde, si me dejara entrar para buscarla por favor.- Miento y suplico un poco.
Por la forma en la que el me esta mirando se que sabe que estoy mintiendo, pero después de unos minutos de dudarlo suspira y me deja entrar.
Entro en el ascensor y presiono el botón de su piso, luego de un muy lento ascenso estoy en frente a la puerta de su apartamento… Entonces me congelo, ¿Qué hago aquí? ¿Debería estar aquí? ¿Y si ella está con alguien?
No ella no haría eso, no faltaría al trabajo por estar con alguien y si lo hiciera creo que por lo menos me hubiese contestado el teléfono.
De repente la idea de que si este con alguien mas hace que me hierva la sangre y que mi visión se vuelva roja… No se que me pasa nunca había sentido algo como esto antes pero, antes de siquiera darme cuenta la marea roja dentro de mi hace que mi puño golpee la puerta.
-Lena!.- Llamo, pero nada pasa.
-Lena abre la puerta.- Digo un poco más fuerte.
Cuando me canso de tocar intento abrir la puerta y para mi sorpresa esta está abierta. ¿Pero que le pasa? ¿Cómo se le ocurre dejar la puerta abierta? Puede que haya un portero pero creo que si yo pude entrar cualquiera puede hacerlo.
-Lena.- Llamo al apartamento aparentemente vacio, la primera vez que vine no pude detallar mucho el lugar y ahora tampoco puedo, tengo que encontrarla.
-Lena!.- Nada… me adentro un poco mas en su hogar y cuando voy a través de un pasillo me encuentro con tres puertas, abro la que esta a mi izquierda.
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Amor en la Música ©
RomanceLa música ha sido parte de Elena Reed toda su vida, hasta el momento en el que su madre fue asesinada... Desde ese momento no toco de nuevo. La música de su alma y su corazón desapareció, si tan solo ese hubiese sido el peor momento de su vida... Ab...