Prólogo

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-Mama! Como vas a hacer eso? Comprometida?!
Serinuma Kae 23 años, estudiante de 3 año de educación.
Habían pasado años desde aquellas confesiones que no tuvieron final feliz en preparatoria, Kae rechazó a todos los que se le habían confesado antes de graduarse lastimosamente o para suerte de su senpai al graduarse antes esta no tuvo oportunidad de responder a su confesión.
-Oh vamos Kae, dale las gracias a mama si fuera por ti te casarías con uno de tus muñecos.
-No deberías ir a buscar a Shishi?
Su hermano palideció y en un dos por tres desapareció.
Kae se acostó en su cama y se oculto bajo la sabana.
-No me casare!
Su madre se sentó a su lado.
-Dale una oportunidad, es un buen hombre, es todo lo que quiero para yerno y seguro es muy parecido al hombre de tus sueños.
-Hmm.
-Por favor?
Kae asomo su cabeza.
-Bien, solo lo conoceré y cancelare el compromiso.

******************************

-Estas bien Kae?
-Si, gracias por acompañarme Shima.
-Tengo que saber si necesitare secuestrarte de tu boda.
-N-no me casare.
-No pareces muy segura.
-Y si mi hermano tiene razón y nunca me caso?
Shima río.
-Bueno Igarashi sigue allí para tenerte en su cama no seria problema para el casarse si así lo consigue.
-Shima...
-Sabes que es verdad, lo de el paso de amor a necesitar tenerte por orgullo.
Kae abrió y cerro sus labios, Igarashi había sido un buen amigo hasta hace 1 año que comenzó a presionarla y buscar cualquier manera de tenerla a solas y tocarla, aunque no eran toques en zonas privadas era incomodo, la hacia sentir mal.
Kae miro a Shima, se habían vuelto tan unidas apresar de que Shima estaba ocupada como mangaka siempre que la necesitaba estaba allí. En verdad lo agradecía.
-Linda futura casa.
Kae dirigió su vista a donde Shima miraba giro su rostro y miro por la ventana del auto, era una casa hermosa tenía un pequeño jardín al frente lleno de flores hermosas y un espacio para sentarse, era de dos pisos y una platabanda, tenia ventanas grandes y un color verde pastel.
Shima estaciono en frente evitando pararse en el estacionamiento de la casa.
Se bajaron y Shima tuvo que tocar Kae estaba muy nerviosa. Rechazar a un hombre, una cosa era rechazar salír con alguien pero un compromiso ya planificado, y si planificado pues su madre ya había organizado el lugar, el vestido, la decoración...
-Kae.
-Eh?
-Tranquila.
Shima le sonrió intentando darle la tranquilidad que necesitaba.
-Ya voy.
Las palabras que vinieron de la casa parecían venir de una voz tranquila, por un instante Kae se calmo es voz era...
El sonido de la puerta abriéndose la distrajo de sus pensares se inclinó rápidamente.
-Y-yo soy Kae Serinuma s-su prometida p-pero yo no...
La voz de Shima la detuvo de seguir.
-Senpai?
-Hace mucho que no te veía Serinuma-san, Shima-san.
Kae subió su rostro encontrándose al que anteriormente fue su senpai.
-Mutsumi-senpai...

Mi maridoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora