Travesuras hanbaek]

Capítulo Único

—Baekhyun, me han dicho que el agente de bienes raíces de la compañía Green House está buenísimo —dijo Jongdae un poco alto haciendo que el resto de la gente en el restaurante los miraran raro. —Tal vez deberías intentar ir ahí. También dicen que las casas y departamentos que venden son una de las mejores opciones.

—Sí, son una opción eco-friendly. Dicen por ahí que las casas poseen celdas solares que dan electricidad a todos los espacios de ésta. Las estufas son totalmente eléctricas y el calentador de la ducha también lo es, ¿no es genial? Aparte, tu siempre has sido amante de la naturaleza y la ecología, Baek —Comentó Junmyeon intentando apartar las palabras sugestivas de Jongdae.

—Sí, pero no sé si una casa así entre dentro de mi presupuesto. —Baekhyun mencionó mientras llevaba la taza de café a los labios.

—Siempre puedes pedir un descuento al agente —Dijo Jongdae guiñando un ojo y Baekhyun soltó un bufido. Puso su taza en la mesa mientras miraba a Jongdae con cara seria. —¡Ay por favor! No me mires con esa cara, Baekhyun. No eres un santo y lo has hecho con anterioridad. ¿U olvidas al chico del parque de diversiones que nos quería cobrar más? Esa vez la gente te podía escuchar hasta-

—¡Suficiente, Jongdae! —Se rindió Baekhyun —De acuerdo, lo intentaré mañana. —Dijo levantándose y sacando la cartera del bolsillo del pantalón, agarrando algunos miles de wones y dejándolos en la mesa para que los chicos pagaran. —Me tengo que ir. Luhan quiere que comentemos el proyecto que vamos a aplicar en Gangnam la siguiente semana.

—¿El centro comercial? —Preguntó Minseok quien se había quedado callado todo el tiempo y asintió hacia él. Baekhyun se despidió con una leve reverencia y un nos vemos.

El camino a la empresa en donde trabajaba no era largo. Baekhyun y sus amigos siempre elegían ese restaurante porque la comida era cien por ciento casera y la señora que atendía ya les tenía reservado su tradicional lugar. Ultimamente el trabajo se les había juntado a todo su grupo de amigos; especialmente a Baekhyun, ya que pertenecía al equipo que realiza los caprichos del gobierno del país, pues a éste se le había ocurrido construir más centros comerciales, pff, como si no hubiera suficientes ya. Al llegar al edificio, Luhan lo estaba esperando en la entrada con algunos planos de la construcción. El castaño estaba un poco harto de trabajar en contra de sus propios principios, pero ¿qué podía hacer? Tenía un trabajo bien remunerado y una vida llena de lujos... bueno, no así en grande que digamos pero podía darse algunos lujos de vez en cuando. Pero cada vez que mandaba a tirar arboles, o a los agentes de recursos humanos a comprar los terrenos de la gente que vivía en donde se construiría x cosa, se le partía el corazón. A veces Baekhyun pensaba tan sólo me habría gustado ser un simple arquitecto diseñador de casas, ¿qué se yo?

La junta que se llevó a cabo fue aburrida, como siempre. Un hagan esto y hagan lo otro del director Shim y fin de la historia. Honestamente, lo único que Baekhyun quería hacer era llegar a casa, tomar una rica ducha y meterse a las cobijas a dormir. Ni siquiera dan las cinco de la tarde y yo ya estoy pensado en dormir. De acuerdo, el trabajo ha sido duro estas últimas semanas, la construcción empieza la siguiente y su equipo de trabajo  no habían enviado aún los planos al departamento de construcción del Estado. Baekhyun llamó al chofer que siempre lo llevaba de vuelta a su departamento, porque una de las ventajas de ser parte de la comisión federal era transporte gratuito y con chofer incluido. Cuando llegó a su hogar lo primero que hizo fue meter el café frío que había sobrado de la mañana al microondas para que se calentara, se acercó a la alacena y estirándose tomó la crema de maní y el pan tostado. Baekhyun se sentó en la barra y comenzó a untar la crema sobre el pan. Ni siquiera le gustaba el maní. Justo cuando estaba a punto de darle una mordida al pan, su celular sonó indicándole que tenía un mensaje; lo tomó de la mesa para desbloquearlo y lo leyó: