Abril

Mes Primero

Todo comenzó una fría tarde del mes de abril, acababa de salir de la escuela y me dirigí rápidamente con las manos en los bolsillos al colegio de mi mejor amigo, en estos momentos lo único que deseaba era estar recostada en mi cama bebiendo una taza de café caliente pero el tenia unos papeles que me eran completamente necesarios para seguir en el taller de canto que tanto me gustaba. Camine lo mas rápido que me fue posible hasta que llegue a la pileta que esta en frente de su colegio, me coloque los auriculares para esperar su hora de salida pero pasaron 10... 20... 30 minutos y no salia, comencé a llamarlo pero no atendía mis llamadas. ¿Es en serio? me pregunte a mi misma , no puede ser que haya olvidado algo que reiteradas veces le mencione era tan importante para mi, tome mi mochila con la intención de irme tremendamente frustrada y desanimada de vuelta a casa, cuando alguien me golpea suavemente el hombro.

¨¿Tu eres Paz?¨ me voltee para encontrarme con un muchacho bastante alto, de cabello castaño, con una muy linda sonrisa. No era para nada de mi gusto. Al salir del trance en que entre cuando me sorprendió con su pregunta logre modular un:

¨Eh si, ¿porque?¨me miro divertido por la manera en que reaccione.

¨Soy Martin, Ignacio me pidió que te entregara esto¨dijo extendiéndome los papeles que estuve esperando por media hora.

¨Oh, muchas gracias¨fue lo único que conseguí decir en ese instante ¨¿como supiste que era yo?¨pregunte luego de un instante ya que me pareció extraño que solo se acercara a mi si haberme visto antes.

¨Querida Pasi...¨

¨Solo Paz por favor¨ lo interrumpí de inmediato, si hay algo que odio es que me llamen con adaptaciones de mi nombre

¨Perdón Paz, por la descripción que me hizo el Nacho de ti no fue muy difícil identificarte, pequeña, delgada, rubia, de ojos claros, bastante abrigada sin necesidad de mucho frío y realmente muy linda¨me sonrió, ¿Ignacio me describió de esa manera? El tal Martin parecía muy convencido al describirme y hablaba como si de alguna forma ya me conociera, me sonroje ante lo ultimo que menciono y baje la vista al suelo para evitar su seductora mirada.

¨Wow, ¿En serio dijo eso de mi?¨ pregunte estúpidamente y al darme cuenta la idiotez que acababa de decir, volví a bajar la mirada.

¨Claro¨titubeo y comenzó a mirarse las manos en señal de que mi pregunta lo puso nervioso, al menos no era solo yo la que de alguna forma se sentía intimidada por la presencia del otro ¨digo... casi todo me lo dijo el¨sonrió con vergüenza.

¨¿Casi todo?¨pregunte confundida.

¨Lo de que eres realmente hermosa lo note con mis propios ojos¨respondió con una sonrisa torcida, su respuesta me dejo perpleja y la verdad estaba bastante incomoda por lo que solo asentí agradeciendo. Le di las gracias por los papeles y comencé a caminar para irme a casa.

Apenas llegue a casa comencé a revisar los papeles para asegurarme de que estaba todo lo necesario, me decidí al fin por hablarle a un compañero de grupo que me parece bastante guapo de hace un tiempo cuando me encontré con una hoja ajena a los datos que estaba revisando...

¨98765432, háblame. Martin¨

Quede totalmente anonadada al leer esto, estuve pensando un buen rato si hablarle o no ya que de alguna forma era un completo desconocido, pero a la vez me parecía conocerlo ya, finalmente me decidí a hablarle, tener nuevos amigos jamas es malo, ademas si lo pensaba objetivamente el chico de mi grupo también era un desconocido y no me hice problemas para hablarle. En el momento en que comenzamos a hablar me sentí realmente a gusto, me hizo reír un montón y era demasiado agradable para ser verdad. Hablamos un par de días y se acabo, las conversaciones se volvieron aburridas, comencé a ser mas cortante en mis respuestas y simplemente no hablamos mas.