1. ¿Dónde está tu chico?

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01 ¿Dónde está tu chico esta noche?


Farkle se encuentra de pie a un lado de la sala y observa como todos en la fiesta le desean un feliz cumpleaños a Riley. La gente la abraza a su izquierda y derecha, haciéndole cumplidos, y dándole regalos. Verdaderamente es el sol, hermosa y brillante. Todos orbitan a su alrededor, tomando sus deslumbrantes ojos y su cálida sonrisa.

Y de algún modo, Lucas es capaz de acercarse a ella sin quemarse. Es el único que siempre logra estar a su lado y sostener su mano como si no fuese la gran cosa. Farkle ve a Lucas pasar un brazo vagamente por la cintura de Riley, girándola hacia él y plantando un beso en su mejilla. Un hoyo se forma en su estómago, viéndose obligado a voltear la cabeza hacia otro lado y pretender tomar un sorbo de su bebida. No puede soportar mirarlos por más de un segundo.

De pronto, alguien en la cocina enciende la música y todos alrededor de la muchacha comienzan a bailar. Riley toma la mano de Lucas, invitándole a bailar con ella, pero éste aparta su mano y susurra algo en su oído. La atención de Farkle es atraída nuevamente hacia ellos, justo a tiempo para ver el rostro de Riley ir de feliz a triste, y luego ve a Lucas y a Zay saliendo por la puerta principal. Maya la distrae rápidamente, haciéndola girar y llevándola a una parte diferente de la habitación, pero cuando la canción termina, Riley se aleja de Maya y toma asiento en el ventanal de la sala de estar. Mantiene una falsa sonrisa en su rostro, lo que parece engañar a la mayoría de las personas en la habitación. Su especialidad es nunca dejar que alguien la vea lastimada, pero no logra engañar a Farkle.

Él camina hacia el ventanal y se sienta a su lado, teniendo que luchar contra el instinto de acariciarle el cabello y envolverla cálidamente en sus brazos. En su lugar, decide por lo que cree que es una pregunta simple.

—¿Qué sucede? ¿A dónde fue Lucas?

—No lo sé —ella responde en un tono derrotado.

Confundido, Farkle continúa—. ¿No te dijo a dónde se iba?

—Sólo dijo que necesitaba irse y que me escribiría luego —dice, apoyando su mentón sobre una mano mientras sus ojos escanean la habitación.

—Esta es tu fiesta, Riley. Deberías ir a divertirte. Olvídate de él.

—Tienes razón —afirma ella, pero no hace ningún movimiento para levantarse. En su lugar, suelta un fuerte suspiro y hace poner a Farkle en el borde del colapso. Antes de saberlo, palabras que siquiera había preparado para decir de pronto se encuentran saliendo de su boca.

—Riley, ¿él es bueno contigo?

—¿Qué? —dice, tomada por sorpresa.

El muchacho sabe que no puede retractarse ahora, por lo que sólo prosigue—. ¿Es un buen novio? —cuestiona, esta vez sin rodeos.

Riley frunce las cejas y espera un minuto antes de responderle—. Por supuesto que lo es.

Pero Farkle no le cree. No está seguro de si Riley siquiera cree en sus propias palabras, a juzgar por la mirada vacía en sus ojos. Así que insiste—. ¿Incluso cuando hace acrobacias como esta?

La implicación debió enfurecerla, porque sin decir palabra alguna, ella se levanta del ventanal y camina hacia el otro lado de la habitación.

Farkle no está seguro de con qué está más molesto: el hecho de que Riley esté ciega ante lo que ocurre en su relación, o el hecho de que sabe que él podría ser un mucho mejor novio que Lucas.

Fall Out Boy Drabbles | RiarkleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora