Cogí la maleta, y me despedí de la que ya no sería mi casa. Ah, se me olvidaba me llamo Catie, y tengo 12 años. Me voy a mudar a una granja fuera de la gran ciudad. Se la compramos a una vieja que quería modernizarse. Lo digo de verdad...
"Venga Catie. La granja no va a estar nada mal!"me dijo mi padre con cara de preocupación.
Adiós ciudad.