~Don't Give Up~

Capitulo X

Los ojos de Chris se abrieron un poco mas. Sabia que los profesores no podían arriesgar a los alumnos sobrantes, de modo que sabia que debía arreglárselas solo. Por primera vez, solo.

Tomando toda pizca de fuerza, logro ponerse de pie. Intento inhalar aire, pero era tan frío y casi pudo sentir que sus pulmones se congelaban.

La nieve comenzó a caer con muchisima mas fuerza que antes, impidiendo el paso del joven. Chris observo su mochila, pero supuso que podía dejarla allí. No es como si tuviese cosas demasiado importantes ahí metidas. La dejo a un lado, mientras caminaba muchísimo más rápido debido a la pesada mochila que había dejado atrás.

Se estremeció cuando vio al frente; no había más que aquella blanca visión que poco a poco se hacía más y más densa.

...

Martín camino de un lado a otro con su ceño fruncido de preocupación. Delante de él, los profesores se estaban encargando de notificar a las autoridades de la montaña de la desaparición del joven.

Algo toco su hombro, y cuando volvió su mirada, pudo ver el preocupado rostro de Aviva sobre el. Si, debía mantener la calma. Su hermano estaba allí afuera; vivo. No debía subestimarlo.

Pero la noche estaba cerca, y pronto el equipo de exploración que había salido a buscar a Chris volvería. Tal vez lo encontraron... O tal vez no.

Jimmy estaba observando por una de las ventanas de la caseta. Preocupado. Se supone que Chris no debería estar tanto tiempo fuera en el frío de una montaña. El ya había pasado por fuertes enfermedades que casi habían arrebatado su vida cuando era mas joven por culpa del frío. Jimmy se estremeció, pero espero que fuese solo la preocupación, y no algo mas.

Jimmy suspiro. Después de tanto tiempo con Martín y Chris, había llegado a ser muy, muy cercano con ellos dos, y debía admitir, muy difícilmente para el, que Chris se había transformado en algo más que un amigo. Y sus mejillas se tiñeron de rosado mientras fruncía el ceño.

No quería que Chris muriera allá afuera, solo.

El equipo de rescate apareció abriendo la puerta, dejando entrar aquel vendaval a la caseta por unos instantes antes de cerrarla detrás de ellos. Eran dos hombres y una chica bastante joven. Ella se quito la capucha de su cabeza, dejando ver un bonito afro de color negro y ojos acaramelados. Ella miro con tristeza a los presentes.

-No logramos encontrarlo, solo su mochila estaba en el lugar en el que cayó- dijo la hermosa chica de piel morena con su voz temblando.

Martín tomo aire y se forzó a si mismo a no llorar. Su hermano estaba vivo. Estaba vivo. Estaba vivo.

Sin embargo, su traicionero cerebro comenzó a repetir en su cabeza los recuerdos más entrañables que tenia con su hermano. La primera vez que lo vio, la primera vez que lo tuvo en brazos.

Todos ellos se mezclaban entre si, creando un maraña y provocando que el labio de Martín temblara.

Se sobrepuso al dolor de repente, como tantas veces su madre lo había hecho.

Los dos hombres estaban hablando con Aviva y Jimmy. No saldrían hasta que el alba llegara, pero Martín sabia que a Chris no le quedaba mucho más tiempo.

Algo toco su mano. Dirigió su mano hacia lo que lo había tocado. Se encontró con los abrazadores ojos de la chica que había salido con los hombres, nublados de culpa e incertidumbre.

-Voy a ayudarte a buscar a tu hermano, pero no debes decírselo a nadie-