Par de bobos (pt1)

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Nieva sobre Londres el 24 de diciembre de 2016, un frio impresionante golpea a la ciudad, dicen que por mucho es el dia mas frio del año, la nieve cae sin cesar, el viento corta, de las casas salen humaderas de las chimenas, los lagos están congelados y hay niños patinando, los perros corren por las calles con el lomo lleno de nieve, los árboles están vestidos de gala extendiendo sus brazos al cielo, un olor a castañas asadas se cuela por alguna ventana inundando el lugar, y yo estoy en el parque Richmond con Heechul a mi lado, tomando vino caliente mientras el por alguna razón toma mi mano, seguro es el frio, pienso alejando pensamientos, pero es que no es tan fácil hacerlo cuando con solo tomar mi mano hace que el universo desaparezca, nada me importa mas en ese momento que el tacto de su mano sobre la mía, no hablamos, no nos miramos, solo tomamos vino caliente mientras observamos el panorama, y es agradable.

Donghae, Hyukjae, Siwon, Kyuhyun y Sungmin decidieron que sería lindo pasar la navidad todos juntos, así que nos venimos todos juntos, y por primera vez, después de mucho tiempo, sentía que iba a pasar la navidad con mi familia, y no con esas personas con las que tengo un lazo sanguíneo, voltee mi mirada hacia donde estaba una fuente con el agua congelada, Kyuhyun modelaba para Sungmin, el cual dibujaba en su cuaderno de dibujo, se le veía emocionado, Donghae y Hyukjae, se correteaban como un par de ardillas por todo el parque, Siwon se dedicaba a tomar fotos de absolutamente todo, Mimi y Hongki se habían perdido en una panadería, y yo...yo estaba hipnotizado por ese coreano de ojos gatunos, voltee a verlo, estaba maravillado, con la nariz roja por el frio, se veía hermoso, quise besarlo, en otro momento me hubiese controlado, al fin y al cabo era un lugar público, pero, pensándolo bien, nadie me conocía en esta ciudad, y como si Heechul me hubiese leído la mente puso su cabeza sobre mi hombro y suspiró, aproveché ese momento para rotar mi cara y encontrar sus labios, primero fue un toque, pero después, su mano se enredo en mi cuello y me empezó a besar, lento, un beso con cariño añejo, un beso que esperaba paciente a su dueño, sus labios eran maravillosos, su saliva sabor vino y arándano, subí mi mano para acariciar su mejilla, estaba helada, ante mi tacto se crispó pero eso no impidió que nos siguiéramos besando, la falta de aire nos hizo separarnos pero dejamos nuestras frentes juntas, sonriendo como un par de bobos...


Amor o compromiso WATTYS2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora