La verdad~

Jensen llegó a su casa exhausto por el viaje. Sólo quería tomar algo de beber e ir a dormir, ya que eran las 11:15 de la noche.
Antes de ir, fue a echarle un vistazo a JJ, que ya estaba profundamente dormida. Se ve que había estado jugando mucho.
Luego fue a su habitación esperando para acostarse finalmente, esperando ver también a su esposa dormida. Pero no fue así. Cuando abrió la puerta se encontró con ella parada en la punta de la cama, con los brazos cruzados. Carajo, estaba enojada. Y eso nunca significaba nada bueno.

-Hola, estoy en casa.

-No me digas- Respondió con enojo, y su sarcasmo se notaba hasta a dos cuadras de distancia. -Cerrá la puerta Jensen, no quiero que nuestra hija oiga nada de esto.

Remarcó la palabra *Hija* con más fuerza, como si quisiera decir algo.
Este cerró la puerta mientras se preguntaba... ¿Qué mierda? Pero se quedó callado.

-¿Es verdad?- Preguntó Danneel.

¿De qué hablaba? No lo sabía. A demás estaba muy cansado para andar adivinando, sólo quería descansar.

-Por favor ve al grano porque no te estoy entendien... - dejó a medias la frase ya que lo interrumpieron.

-¡De tu relación con Misha! -Gritó Danneel. La furia empezaba a reflejarse en sus ojos.

Esa si que no se la esperaba. No ahora. No en ese momento.
¿Lo habría deducido sola?
¿Habría visto algo?
¿Alguien le había comentado algo? Esto no podía ser ya que la única persona enterada era Jared, y el nunca lo traicionaría, eran prácticamente hermanos. Era cierto que le había parecido mal ocultárselo a Danneel pero le había prometido que lo hablaría con ella  en su momento.
Millones de preguntas se hicieron presentes en la mente de Jensen.
Mierda.
Estaba jodido y no sabía cómo responder. Lo había pillado total y completamente por sorpresa.
En realidad si sabía. Era hora de decir la verdad y dejar de fingir.
Ser el mismo.

Así que respondió:
-Sí, es cierto.- Es que no podía hacer otra cosa que afirmarlo.

La cara de su esposa era indescriptible.

-¿Cómo es que...- Dejó la frase a medias.

Entonces su cara se volvió muy roja. Se transformó por completo. Jensen pensó que le iba a dar algo. Nunca la había visto así.

Empezó a gritar:

-¿ES EN SERIO? ¡TENEMOS UNA HIJA Y ESTOY EMBARAZADA DE MELLIZOS. ESTAMOS CASADOS, SOY TU MALDITA ESPOSA! ¡EL ES NUESTRO AMIGO Y POR SI NO LO NOTASTE TAMBIÉN TIENE UNA FAMILIA!

Le gritó como nunca le habían gritado. No conocía esa parte de ella, y ahora la frase "Nunca se termina de conocer a una persona. No por completo" tenía más sentido que nunca.

Su mujer tomó aire mientras intentaba calmarse.
Entonces, como si fuera poco, hizo la siguiente pregunta:

-Jensen, ¿tu amas a JJ y a los bebés que están por venir?

¡Como se atrevía!

-Claro que los amo mujer, ¡son mis hijos!- Respondió Jensen enojado. No tenía derecho alguno a enojarse en ese momento pero esa pregunta... era de lo más boba.

-¿Y me amas a mi?

Jensen le fue sincero.

-Danneel, cuando nos conocimos me enamoré completamente. Nos casamos y estamos formando una famil.. -Danneel interrumpió.

-¿Me amas o no?- Parecía muy impaciente.

-Desde hace mucho tiempo estoy ocultando lo que siento realmente. Tenía miedo, solo que ahora me cansé de tenerlo. Se que me odias y te hice y te estoy haciendo muchísimo daño, pero te juro que te iba a contar todo. No quería esconderte nada. La verdad es que no siento nada hace un largo largo tiempo. - Hizo una pequeña pausa, y prosiguió - Lo nuestro fue realmente bueno. Te amo como amiga y compañera, y como persona, eres una de las personas más maravillosas que conozco pero, no te amo como amo a Misha.