¡Gracias por cuidarme![BTS y tú]

Capítulo 31 [Especial de Año Nuevo Pte. 2]

Las lágrimas amenazan con salir de mis ojos.
-Te estás reuniendo con alguien, ¿no es así? ¡Entonces, ¿por qué dijiste que te gustaba? Dime!- suelto.
-No me estoy reuniendo con nadie _______- dice calmado.
¿Cómo puede estar calmado en una situación cómo esta?.
-Te reuniste con una chica hoy en la mañana.
-Ah eso.
Lo miro furiosa.
-¡Si, eso!- le doy un golpe en el pecho.
-Ella es una organizadora, me estaba dando consejos.
-¿Consejos para qué? Idiota.
-Si me sigues te lo mostraré- su expresión calmada me hace molestar mucho más. Extiende su mano y la tomo sin decir palabra.
Caminamos por toda una calle y nos detenemos en seco otra vez. Estamos en un parque donde un lago está en el medio.
Se ve muy bello pero no hay luz.
Nos sentamos en una banca justo frente al lago.
-Ya, ¿aquí es?- pregunto seria y suelto su mano.
-Si.
Me asusto y me alejo de él un poco.
-¿Me trajiste a un lugar oscuro? Maldito pervertido, gritaré si me haces algo.
Se acerca lentamente y levanta mi barbilla con una de sus manos.
-Pues grita.
Tomo el suficiente aire para soltar un chillido tan fuerte que se escuche hasta la siguiente manzana. Cuando estoy a punto de soltarlo, soy interrumpida por un beso.
Cierro los ojos y me dejo llevar por el momento.
Suga idiota.
Estaba enojada contigo y me besas...eso es trampa.
Nuestros labios se mueven a la par y yo paso una mano por su cabello, tocándolo suavemente.
Es como mi sueño, pero mejor.
Yoongi pasa su otra mano a mi espalda y me estremezco ante su tacto.
Nos separamos y juntamos nuestras frentes.
-¿Crees que con esto te perdonaré?- digo en un susurro.
-Esto es sólo el comienzo- suelta una sonrisa de lado.
Todos los faroles del parque comienzan a encenderse causando una iluminación sumamente preciosa que hace lucir al lago mucho más que antes.
-¿Qué es esto?- pregunto sin entender y mirando hacia todos lados.
Suga aprisiona mi rostro entre sus manos.
-______- dice y lo miro fijamente- ¿Quieres ser mi novia?.
No lo dijo en coreano ni en inglés. Así es, lo dijo en español y con una pronunciación algo graciosa.
Comienzo a reír.
-¿Es en serio?- le digo entre carcajadas- ¿Lo dijiste en español?.
-¡Ey! Lo estuve ensayando dos días.
-Si quiero- respondo con una sonrisa inmensa.
Él imita mi acto, baja sus manos de mi rostro a mi espalda y me acerca a él en un abrazo.
-Tú...-digo bajo en su oído- Aún no me explicas lo de la otra chica.
-No olvidas ninguna, ¿cierto?- responde gruñón.
-Por supuesto que no- río y nos separa un poco.
-¡Señorita Kang!- dice en voz alta y lo miro confundida.
Una mujer muy linda aparece frente a nosotros haciendo una reverencia.
-Ella es la señorita Kang, me ayudó a organizar todo esto.
-Muchas felicidades- sonríe y le deja a Suga un ramo de rosas.
-Gracias- responde este y ella se retira.
-¿Rosas?- lo miro molesta- ¿Por qué te da rosas?.
-Son para ti tonta.
Me las extiende y yo las tomo con timidez. En mi vida un chico me había dado rosas.
Recargo mi cabeza en su hombro y él pasa su brazo por mi espalda abrazándome.
-Te ves hermosa hoy- me dice.
-Tú no te ves tan mal de traje- respondo burlona.
-Yo me veo genial siempre.
Comienzo a reír. Modesto como siempre.
-Este lugar es hermoso- cambio el tema y sigo admirando el lago.
-Era mi lugar favorito. Siempre que quiero escribir una canción vengo aquí.
-Así que no es un lugar escogido al azar.
-Claro que no. Desde ahora será al único lugar que venga.
-¿Me traerás contigo?.
-Ya no es mi lugar favorito. Ahora es nuestro lugar favorito- recalca la palabra nuestro- Es obvio que vendrás conmigo.
Me recargo más y apoyo la cabeza en su pecho.
-Hueles a sudor- digo bromeando.
-Corrí varias calles para encontrarte. Es lógico.
-Ya, si no hubieses fingido que no habría cita esto no hubiera pasado.
-Si no te hubieras vengado saliendo con ese tipo- dice serio.
-Vale, si salí con él- admito- Pero estuve pensando en ti toda la noche.
-¿En serio?- voltea a verme y asiento con una sonrisa.
Suelta una sonrisa enorme.
-Vaya, gran sonrisa- le reprocho.
-Ya sabía yo que te traía loca- dice egocéntricamente.
-Si claro. Muy loca- respondo con sarcasmo.
-Hasta sueñas cosas pervertidas conmigo.
Le doy un golpe en el estómago.
-¡Ya te dije que yo no sueño eso!- lo regaño- Lo has de decir por ti.
-Claro, yo pienso en ti todas las noches- susurra en mí oído y el calor sube a mi rostro.
-No me des detalles gracias- lo detengo- Aish, eres un sucio.
Comienza a reír a carcajadas.
-Sólo contigo.
-Sucio...pervertido...¡viejo verde!.
-¡Ey! ¿Qué dijiste?- pregunta enojado.
-Viejo verde- repito más lento.
-¿Ah si?- sonríe de lado y se acerca hasta besarme.
Sus labios son tan suaves que cada vez que los choca con los míos siento un dolor en el estómago.
Se separa lentamente.
-Cada vez que me digas viejo verde te besaré- susurra en mis labios.
-Viejo verde- sonrío y vuelve a estampar sus labios con los míos.
Subo una mano hasta su mejilla y con la yema de mi dedo pulgar dibujo círculos en ella.
Nos separamos sin despegar nuestras miradas.
-No hagas eso- baja mi mano de su rostro- Es demasiado tierno.
Suelto una tímida risita y le doy un beso rápido para después levantarme de la banca.
-¿Qué hora es?- preguntó estirándome.
-Doce en punto. Feliz Año Nuevo.
-Feliz Año Nuevo- respondo y me abraza por la espalda.
Me giro hasta quedar frente a él y escondo mi rostro en su pecho.
-Los besos rápidos no valen. Me has dejado con las ganas- lo escucho decir.
Niego con la cabeza aunque él no puede verme.
-¿Me escuchaste?- vuelve a hablar.
-Si- alargo la palabra- Pero no volveré a besarte.
-¿Beso mal?.
-No, pero cuando nos besamos me cuesta recuperarme- me separo y quedamos frente a frente- Mi corazón late tan rápido, que siento que va a explotar- pongo una mano en mi pecho.
-¿Crees que yo no?- evita mi mirada- A mí también me da miedo besarte. Siento que no podré controlarme después- lo veo bajar un poco la mirada hacia mí.
El corazón me de un vuelco y creo que tendré que hacer cita con un cardiólogo. Este chico me matará de un infarto, en serio.
Este ha sido el mejor Año Nuevo que he pasado en mi vida.