Capítulo 27: Mi vida gira en contradicción.

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Y ahí va, la pregunta que me va a romper el corazón:


– ¿acepta por esposo a Gustavo Adrián Cerati?


– Si, obvio que aceptó. – contestó Cecilia más que convencida.


– Usted, ¿acepta por esposa a Cecilia Amenabar?


Sentí como me latía el corazón a mil por horas, me aferré a Charly y apoye mi cabeza en su hombro. Por más que me hacía la fuerte no podía, quería salir corriendo de allí.

Gustavo no ccontestó, el silencio se apoderó de la iglesia y la mirada de Cecilia firme y casi amenazante sobre él. Este se dió vuelta para mirarme a los ojos y negó con la cabeza. Puedo jurar que si Charly no me estaría agarrando, me desmayaría.


*Narra Gustavo*


Cuando el cura hizo la pregunta, miles de dudas comenzaron a invadir mi mente... ¿De verdad quería casarme con Cecilia? ¿Queria dejar que Vera se vaya de nuevo? ¿Que la chica que pasó 7 años conmigo, sufriendo y estando para mi a pesar de todo se vaya? 

Me di vuelta y ahí estaba ella, la chica a la cual le escribí "En camino", con los ojos hinchados y su vestido verde agua hasta las rodillas. No iba a cometer el mismo error dos veces, la amaba, la amaba tanto que soy capaz de parar está locura.

Negué con la cabeza.


– No, no puedo. 


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– No, no puedo – dijo Gustavo sin más.


Miré a Charly sorprendida, todos susurraban cosas, era verdaderamente incómodo.


– No me puedo casar con vos Ceci, me voy a hacer cargo de todo, del bebé y demás pero no puedo. Te pido perdón. – Gustavo hablo serio.


– ¿Esto es por esa no? – Cecilia se alteró y me señaló provocando que todos me miraran.


Quería que la tierra me trague y me escupa en el 1986 para evitar todo esto.

– Cecilia por favor calmate. – Gus trataba de calmarla.


– ¡No me calmo nada! 


Se acercó a mí.


– ¿Contenta? 


– No se de que estas hablando. – me defendí.


– Listo, tenes a Gustavo para vos sola. Ganaste, me arruinaste todo zorra – se abalzó sobre mi.


Gustavo y Charly intentaban separarnos, yo estaba inmóvil.

Cuando lo lograron la familia de Cecilia se la llevó, los invitados comenzaron a salir mientras susurraban cosas, seguramente no buenas.


– Charly sacame de acá.


– Vamos, salgamos por la otra puerta.


Salimos y subimos a su auto, buscamos un hostal para cambiarnos e ir a comprar los pasajes para volver... Sí, olvidé decirles que estábamos en Chile.


– Es horrible todo esto. – dije sentándome en la cama mientras Charly se cambiaba en el baño.


– Al menos sabes que te quiere.


– ¿Tenia que demostrarlo de esa forma? Además, capaz que ni si quiera lo hizo por mi.


Tocaron la puerta de la habitación.


– A mi me parece que si – señaló la puerta y lo miré desentendida.  


Abrí y ahí estaba él, todavía tenía puesto el traje.


– ¿Que haces acá? ¿Como me encontraste?


Señaló con la cabeza a Charly y le dijo:


– Ya te pedí otra habitación. – le dio otras llaves.


– Los dejo – Charly guineó el ojo, recibió las llaves y salió.


– Ahora si.


– Gustavo me siento muy mal.


Me tomó de las mejillas.


– No te sientas mal hermosa, Cecilia hizo cualquiera, pero acá estoy.


– ¿No lo hiciste por mí no? – ambos respirábamos agitados por la poca distancia que había entre nuestros labios.


– Te amo.


No dijo más nada y me besó. Comenzó tierno pero se hizo desesperado, necesitado.


– Para Gustavo, acabas de suspender tu casamiento. No puedo hacer esto.


– ¿Que pensas hacer?


– No se, mi vida gira en contradicción, ahora quiero que se acomoden las cosas. ¿Vamos despacio si? 


– Siempre.


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*Holaaaax volvi, no tenía idea de que escribir pero logré que salga algo.

Mande a la mierda la realidad en este capítulo pero bueno ajajaja espero que le guste y felices fiestas 😘*





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