Caminaba vestido de negro, con sus ojos rojos de tanto llorar, era un lindo día, el sol iluminaba el lugar como si nada hubiera pasado, como si él no hubiera perdido a nadie, como si su hermano no se hubiera ido para siempre.
Se detuvo frente a una lápida, se sentó a la orilla de un árbol que tenía tras él, acerco sus rodillas a su estómago y apoyo sus muñecas en ellas. Miro la lapido y sus ojos se humedecieron ¿Es que... todos esos años de risas, se estaban transformando en dolor? , llevo su cabeza hacia atrás, y esta choco levemente contra el árbol, cerró los ojos... llevaba dos días sin dormir, dos días sin soñar, dos días que no se sentía vivo.
Abrió sus ojos, miro al frente se encontraba en una de colinas, más cercanas a su casa
-¿Ya has despertado hermano?- era una voz cálida, miro a su lado y ahí estaba, campante y picaron como siempre.
-Si- bostezó-¿Cuánto eh dormido?
-Minutos, horas. Días. Años quizás...
-¿Horas?, ¿días?, con mamá en casa, y el cumpleaños número cinco de nuestra hermana ¿alguien podría dormir horas?
Ambos rieron
-Hey- lo llamo el chico junto a el - mira esto
El chico sostenía en la mano una araña pequeñita y en la otro apuntando al insecto su varita.
-Mmmm... me huele a travesura- después de una mirada cómplice añadió- vamos a poner la casa patas arriba.
Cinco minutos después, un grito de miedo, y minutos después un grito de rabia
-¡LOS QUIERO A AMBOS ACA EN ESTE MOMENTO!- gritaba su madre
Ambos niños se miraron
-Corre por tu vida hermano- le dijo su acompañante, y entonces ambos corrieron entre risas lejos de los gritos de su madre.
En la cocina una niña y una mujer se movían de un lado al otro, apuradas. A su lado el mismo chico con un poco más de edad, pelaba papas al estilo muggle, aun frunciendo el ceño, levanto la mirada hacia su madre y pregunto:
-¿Por qué tengo que hacer esto?
-Porque hoy es navidad y viene gente a la casa
-¿Harry mamá?- pregunto la niña más pequeña
-Si amor, Harry viene
Una sonrisa ilumino el rostro de la pequeña, los hermanos se miraron
-¿Será que...-dijo uno
-...Nuestra hermana está enamorada....-siguió el otro
-...Del chico que vivió? -Termino el primero en hablar
La chica se sonrojo, y su madre los miro enojada
-¡No molesten a su hermana!- exclamo su madre -¡por merlín!, ¡terminen de pelar esas papas!
-Si mamá...- dijeron al unísono
Frente a él su madre los miraba enojada y gritaba:
-¡Expulsados! ¡Ambos! ¡Qué piensan hacer ahora! ¡No terminaron el colegio! ¡Por merlín! ¡Que hice mal con ustedes!
La mujer se movía de un lado al otro, moviendo las manos frenéticamente, miro a su lado a su hermano gemelo, y este a su vez también lo miro, su hermano le guiño el ojo, dando así la señal ya acordada, camino al frente y se acercó a su madre
-Mamá...- la mujer lo miro sorprendida el paso su brazo por los hombros de su madre provocando que esta lo mire con más asombro aun- no te preocupes, nosotros ya tenemos un plan.
Su hermano saco su varita y apunto al cielo, de ella salieron miles de papelitos de colores, el chico se movió a un lado y dejo ver lo que escondía tras él, sobre una mesa una caja con múltiples compartimentos se mantenía posada en una mesa, en el centro de la caja una gran "w " de color naranjo.
Entonces su hermano anuncio:
-¡Con ustedesss!, ¡los productos Weasley!
-¡Tenemos de todo!- dijo el poniéndose al otro lado de la caja
-Ahhh y por cierto- añadió su hermano- si nos devuelves las orejas extensibles confiscadas, daríamos otro paso con el negocio.
Su madre los miraba atónita
-Yo no sé qué hice mal con ustedes... pero es su negocio, yo... solo deseo que les vaya bien con esto
Su madre se retiró completamente resignada
-Bien hecho hermano-dijo el
-Lo mismo digo de ti- le respondió su gemelo
Se encontraba en Hogwarts, gente corría por todos lados.
-Hermano- llamo el chico que tenía a su lado
-¿Hermano?- pregunto el
-Vamos a ganar esta batalla
-Vamos a ganarla...
- ¡Hey!...Te quiero hermano
-Yo también te quiero desorejado- ambos se mantuvieron en silencio-¿por la familia?- pregunto el chico a su lado mirándolo y se puso en posición de batalla
-Por la familia- afirmo el
Acto seguido ambos se internaron en el tumulto de gente, luchando espalda con espalda, aquella batalla.
Se estaba levantando, después de la explosión le costaba un poco moverse, escucho un grito cargado de puro dolor
-Mi hermano-susurro
Se levantó, y miro donde minutos antes de la explosión estaba sus hermanos luchando, su hermano mayor estaba arrodillado en el piso, lloraba, lloraba con dolor, en sus brazos sostenía una cabellera roja, corrió donde sus hermanos, y vio lo que probablemente formaba parte de su peor pesadilla. Su hermano, su gemelo, su cómplice, estaba tirado en el suelo, con los ojos vidriosos...no había vida en ellos, estaban apagados, no tenían luz.
Se arrodillo a un lado del cuerpo de su hermano y las lágrimas no tardaron en salir, el dolor no tarde en aparecer. Se apoyó en el pecho de su gemelo y lloro hasta no poder más, lloro como si su vida se fuera en ello, lloro hasta no recordar nada más.
Despertó, abrió los ojos y miro al frente, la lápida seguía hay solo que esta vez teñida de anaranjado.
El nombre de su hermano, grabado en ese duro pedazo de piedra no hacía más que recordarle que ya nunca más estaría con él, que todos esos momentos felices, ya no eran más que vanos recuerdos, que había perdido a su gemelo para siempre leyó en voz alta:
-Fred Gideon Weasley, 1 de abril de 1978 - 2 de mayo de 1898
Se secó las lágrimas derramadas.
Se acercó a la lápida y como si su hermano pudiera oírlo puso una mano en el nombre de su hermano y susurro:
-Creo que eh perdido esta batalla.
Después se levantó y camino rumbo a la madriguera, con el dolor de la muerte de su hermano, pesándole en el alma.
