No me Olvides ✦Vmin✦

Capitulo 32

Mientras los demás seguían jugando a los videojuegos, me estaba aburriendo demasiado, así que decidí cerrar los ojos para descansar un rato.

— ¡Hobii!... Aish... ¿En dónde se metió?— me pregunté mientras cargaba un pequeño balón—... y yo que conseguí este balón para jugar con él...—hice un mohín— ¡Lo seguiré buscando! ¡TaeTae nunca se rinde!

Seguí corriendo, buscándolo, hasta que por fin lo vi más adelante mío. Sabía que era mi hyung, aunque esté dándome la espalda, siempre reconocería a mi hyung.

— ¡Hobi hyung!— seguí corriendo hasta que ya no vi la espalda de mi hyung, sino que ahora veía la tierra. Me había caído y dado el rostro con la dura tierra... pero lo peor de todo es que el balón que tanto había tardado en conseguir, se me resbaló de mis manos y salió volando.

— A-ay— escuché un quejido, por lo que miré hacia todos lados, pero no veía a nadie cerca mío.— N-no respiro— noté que algo se movía abajo de mi panza, así que me levante rápido. Abajo mío había un niño de mejillas muuuy grandes.

— ¡Oye niño! ¡Por tu culpa perdí de vista a mi hyung y a mi balón— él me miró y sus ojos comenzaron a cristalizarse.— O-oye no llores.— Al decir eso, el niño comenzó a llorar más— Lo siento, lo siento. No llores más ¿si?

— D-duele— dijo entre lágrimas.

Miré su rodilla, la cual estaba sangrando.

— Oh... ¿Por eso lloras? Te llevaría con mi papi para que te cure, pero estoy apurado... así que ten— le di un pañuelo bordado de aliens.— No preguntes por qué es de aliens y ve con mi papi, si caminas por allá todo derecho lo encontrarás.

— ¿A-aliens?— con su manito hecha puño se limpió sus ojos.

— ¡Sip! Son seres de otro planeta y estoy seguro que existen, los he visto en mis sueños. Te contaría más de ellos pero realmente estoy muy apurado... ¡Adiós!

— ¡E-espera! ¿C-cuál es tú nombre?

— ¡Kim! ¡Kim Taehyung! Pero me dicen TaeTae— le sonreí y ahora si me alejé de él, yendo a buscar mi balón.

— T-TaeTae...

Corrí en dirección donde había visto mi balón irse, sin darme cuenta que aquel niño miraba como me iba, con una sonrisa en su rostro, mientras abrazaba el pañuelo que le di.

— Yo vi que vino por acá... ¿Se habrá quedado atascado en un árbol?— caminé mirando las ramas de los árboles, por si se encontraba allá arriba, hasta que choque con un gran muro— Ay... e-eso dolió.

Miré el gran muro que se encontraba frente a mi. Tal vez mi balón había pasado aquel muro.

Fui al árbol más cercano al muro y lo comencé a trepar, luego fui gateando por una rama hasta quedar cerca y poder ver que había después de éste.

Había una hermosa casa, aunque mirándola mejor se notaba lo solitaria que era, hasta daba un poco de miedo. Lo que más me llamó la atención fue la mujer que estaba parada mirándome, con el balón en sus manos. En su mirada había algo raro que me daban escalofríos.
Iba a decirle que me devuelva el balón hasta que escuche pasos debajo mío.

— ¡Tae! ¡¿Qué haces ahí arriba?! ¡Baja de ahí rápido!

— ¡Hyung! ¡Consegui un balón, pero se fue allí dentro! Así que le iba a pedir a la señora que me lo...— al mirar de nuevo allí, no había nadie y mi balón estaba en el suelo—devuelva...— sentí como la rama se estaba rompiendo.

— ¡Tae! ¡Baja de ahí es peligroso!

— P-pero mi balón... hyung, lo conseguí para que podamos jugar jun...— La rama se partió, pero Hoseok me atrapó rápido. Aunque por mi culpa hice que este se cayera al recibir mi peso— ¡Hyung! ¿Estás bien?

— Si...— se sentó, dejándome a horcajadas suyo— más importante... ¿Te hiciste daño?— me preguntó preocupado.

— ¡Nop! ¡Hobi hyung es mi héroe!— lo abracé, por lo que él se rió.

— ¿Pero qué hacías ahí arriba?— Terminé el abrazo, dejando mis manos en su hombro.

— Había conseguido un balón para que juguemos juntos, pero cuando choqué con un niño, éste se fue rebotando hasta pasar el muro ese— hice un mohín.— Había una señora ahí que lo tenía, pero luego cuando le iba a decir que me lo devuelva, desapareció... ¿Podemos ir a buscarlo hyung?

— No, no vengas aquí nunca más, es peligroso.

— ¿Por qué?— ladeé la cabeza confundido.

— Esa señora que viste no es normal, es mala.

— ¿Mala?

— Es una bruja, hasta al rey le da miedo. Nadie se quiere acercar a ella.

— P-pero mi balón... yo quería jugar contigo hyung...— comencé a sollozar.

— Tranquilo, tu hyung te conseguirá otro.

— ¿En serio? ¡Hyung es el mejor!— lo volví a abrazar, pero mi sonrisa se borró al ver a la misma señora que sostenía mi balón, a unos metros detrás de Hoseok.

Ella sonrió de una forma que me hizo temblar.

— ¿TaeTae?... ¡TaeTae!

Abrí los ojos rápidamente.

— ¿Te encuentras bien? Pensé que estabas soñando algo bonito porque estabas sonriendo, pero después comenzaste a temblar.

— Había olvidado todo eso— susurré.

— ¿Dijiste algo TaeTae?

— ¿Eh? No... ¿Ya terminaron de jugar Jimin?

— Sip, los padres y los familiares de Jungkook están viniendo, así que dijo que nos arreglemos un poco— me sonrió.

La cabeza había comenzado a dolerme.

Esa sonrisa... La había visto hace años atrás.

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