Empezaba la primavera, era el momento perfecto para limpiar y ordenar un poco la casa, así que sin perder tiempo se puso a trabajar en ello. No podía creer la cantidad de cosas inservibles que tenía en su habitación, encontró varias cosas interesantes, pero una de ellas en particular le llamó la atención. No dudó en levantarla y darle un vistazo. Al abrirla encontró una hoja doblada
- Para Yao ♡ -
Miró la caligrafía, ahora sabía quien la había escrito.-Iván...debe ser él...- ahora el asiático recordaba todo, esa caja se la habían obsequiado hace cuatro meses en su cumpleaños pero el nunca la abrió, sólo la miró y la puso sobre la mesa.
Claro, esta vez se dejó vencer por su curiosidad, así que decidió llegar más lejos y leer la nota.
- ¿Cómo olvidar tus ojos, cuando es ese café intenso el que me roba el sueño noche tras noche?
¿Cómo olvidar tu sonrisa, cuando es esta la que me brinda calor en todo momento?
¿Cómo olvidar tus manos, cuando son ellas las que acomodan mi desordenado cabello cuando nos encontramos?
¿Cómo olvidarte, si eres tú la única razón por la que hoy sigo en pie?
Eres todo para mi, no puedo vivir sin ti Yao-Yao. Esperé este día más que cualquier otro, porque para mí es otro año al lado de la persona que más amo.
Я вас люблю Yao-Yao ♡ ~Sintió como su corazón latía cada vez más rápido, como sus mejillas se calentaban lentamente, como sus labios formaban una sonrisa nerviosa. Sabía que debía ser sincero y aceptar que sentía algo por aquel ruso, al principio pensó que sería algo pasajero, que así de inadvertido como llegó, algún día desaparecería sin dejar rastro alguno. Que equivocado estaba, cada día le resultaba más difícil tratar de ignorarlo, estaba claro que no podía ignorar a alguien cuando su corazón le pedía a gritos que lo tuviese lo más cerca posible.
Entonces ¿qué debía hacer?, ahora se encontraba en medio de un océano de dudas, se sintió como si estuviese en una balanza. Del un lado colgaban su orgullo y su razón, no podía dejarse llevar por una simple nota y asumir que el ruso lo amaba. Del otro lado estaban sus sentimientos, realmente sentía una necesidad de tener a ese ruso cerca, su presencia lo alegraba a pesar de que nunca lo demostrará abiertamente. Luego de pensar en ello vinieron las dudas, que tal si sólo estaba pasando el rato escribiendole algo que tranquilamente pudo haberle entregado a alguien más, que tal si todo lo que le decía en esa carta era una dulce mentira. Considerando que fue escrita hace cuatro meses, que tal si al no recibir respuesta simplemente optó por olvidar ese sentimiento de amor por él y ahora tenía su mirada puesta en alguien más. Fue casi inmediato el cambio de alegre a triste, se sintió destrozado a pesar de no saber si sus suposiciones eran acertadas. Colocó la nota en la caja y con los ojos llenos de lágrimas la dejó sobre su cama.
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Sentimientos Encontrados
RandomYao se encuentra limpiando su casa y encuentra una caja con una carta dentro, es de Iván, un chico ruso que pasaba "molestandolo" constantemente. Es mi primera historia, no es para nada una obra de arte...pero tampoco creo que esté tan mala 😕