CAPITULO I

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-¿Por qué no te calmas y te sientas? ¡Me estás desesperando Pablo!

-Estoy esperando a que mande mensaje para recogerlo, tal vez debería salirme de una vez, es decir, de aquí a que llego al aeropuerto ya se hizo una hora.

-Con tráfico, si maso menos...

-¡Pues vayámonos! Ese wey es de lo más exigente, no quiero hacerlo esperar. Cuando te vea se quedará sin palabras.

-¡NO SEAS EXAGERADO!

Mi primo iba manejando mientras yo mentaba madre y media en mi cabeza, no quería ir, tenía una cita y además Ryder era su mejor amigo, pero yo no lo veía desde mis 16 años.
Tengo pocos recuerdos de el, mis primos y todo su clan son de la alta sociedad en la ciudad, son hijos de empresarios, políticos, doctores, abogados reconocidos como en el caso de Pablo y herederos de grandes fortunas como Ryder...
Ellos hacían mucho skype, y jugaban en línea durante horas, escuchaba las carcajadas hasta mi cuarto, sé que Ryder es ocurrente y con muy buen sentido del humor, pero también sé que es arrogante, narcisista y egocéntrico.
Pablo no, al contrario, es un amor de persona, lo mejor es que vivimos juntos. No me puedo quejar, nuestro departamento es bastante lindo, me atrevería decir que es lujoso, en realidad es de mi primo, mis papás no podrían costear un departamento así. Yo pago la mitad de los servicios, así que él tampoco se puede quejar.

-¿Ana? ¿Has hablado con tu papá?

-Si.

-¿Y luego?

-Lo mismo de siempre, está muy ocupado para venir, aunque creo ya tiene nueva novia, espero y no sea de mi edad, me aterra la idea de competir con ella para ver a quien se le ve mejor un vestido de noche...

-Jajajajajaja para ya, me refiero al dinero de la colegiatura.

-Hm dijo que no me preocupara, él haría el deposito.

-Ya veo...

Un silencio incómodo nos rodeo cuando se me ocurrió:

-¿En cuánto podría vender un riñón por la "deep web"?

-Eres adicta a la coca-cola ya han de estar deteriorados, vende niños mejor...

-Ese niño que dice ser nuestro sobrino, el que lloró cuando lo confundí con su hermano, ¿cuánto crees que me darían por el?

-JAJAJAJAJA! Eres despreciable...

-¿Diez mil? ¿Veinte mil? Lo regresarían a la hora, sus berrinches sacan de quicio a cualquiera...

Llegamos más rápido de lo que esperaba así que fuimos a comer, me pongo de muy mal humor con hambre, mi primo lo sabe así que no dudó ni un segundo cuando se lo comenté.
Adoro a mi primo, trata de disimular su fastidio cuando como porque soy muy lenta, en realidad todo mundo se desespera pues siempre soy la última en terminar. Pero él jamás se queja, sólo sonríe y pone atención a todo lo que platico.

-¿Crees que haya llegado?

-No me ha mandado mensaje, no te apures y come.

-¿Para qué quisiste que viniera? Tenía una cita con Manolo y lo sabías -apuntándolo con mi tenedor.

-¿Crees que quise evitar que lo vieras? Es un pedazo de idiota pero no me meto en relaciones ajenas, bastante tengo con Lily.

Pedimos la cuenta y como siempre no me dejó pagar, a veces me incomodan sus gestos de caridad, pero lo acepto porque lo hace con todo el gusto del mundo.
Nos dirigimos a los vuelos internacionales, Ryder llegaba de Holanda, desconozco la razón por la que quisiera regresar, yo no lo haría, poder asistir a un colegio de primer mundo y convivir con la gente más feliz del mundo ha de ser increíble... maldito.

PERO ES PRECISO SOLTARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora