Despedida cruel (Osomatsu-san)

Despedida cruel (one-shot)

N/A: No tengo excusas, simplemente esta idea se me implantó en la cabeza y no me la podía sacar, así que me disculpó de ante mano y espero la disfruten tanto como yo
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Tras haber encontrado al mejor amigo de Ichimatsu los cinco Matsuno llegaban por fin a su casa.

Al entrar no supieron como, pero el aire de aquel lugar se encontraba realmente pesado, tanto que podía sentirse como si fuese a ser cortado con un cuchillo.

Ichimatsu dejo a su gato psíquico en la entrada, al tiempo que con inquietud y cautela se adentraba junto a los demás en aquel insípido lugar.

Al acercarse a la sala de estar pudieron escuchar el sonido del televisor. Abrieron con temor la puerta corrediza encontrándose con su segundo hermano sentado al lado de la mesa donde acostumbraban merendar.

-Solo eres tu Kusomatsu...- dijo con indiferencia el cuarto hijo mientras caminaba a paso lento hasta la televisión para bajar el alto volumen.

No recibió respuesta del nombrado, mas que eso un sepulcral silenció que heló su sangre se hizo presente mientras giraba su mirada para observar aterrado el estado en el que su hermano mayor se encontraba.

Varias vendas cubrían su frente y uno de sus ojos, su brazo y pierna estaban enyesados.
Aquella escena no era fácil de asimilar, para ninguno de los cinco Matsuno, sobre todo porque ellos fueron los causantes de aquel espectáculo pero, lo mas impactante y raro que pudieron apreciar, es que al frente de Karamatsu, en la mesa, se encontraba su pequeño espejo de mano completamente destrozado y con manchas rojas pintando los cristales esparcidos.

-Karamatsu...- habló el primogénito tratando de llamar su atención, pero solo recibió silencio como respuesta -¿Ka-Karamatsu...?- nuevamente ningún sonido se hizo escuchar, por lo que asustado comenzó a caminar hasta su lado quedando petrificado del horror -¡Choromatsu enciende la luz!- exigió exaltado, a lo cual el tercero de los Matsuno obedeció al instante y, en el momento en que la luz fue encendida Ichimatsu y Osomatsu, que estaban junto al segundo abrieron sus ojos a mas no poder ante aquella escena -Ka-Karamatsu... Tu-tus ojos...-

Ante aquel comentario el resto de sus hermanos se acercaron atemorizados hasta poder ver aquella imposible escena.

Por todo lo ancho de su ojo visible una horrible cicatriz se formaba en su rostro y, una amarga y distorsionada sonrisa se dibujaba en sus labios.

-Esto es su culpa...- al fin las palabras del azulado se hicieron presentes, palabras amargas y ahogadas -gracias a ustedes... Ya no...- apretó sus dientes con fuerza y las lágrimas se comenzaron a escurrir por aquel lechoso ojo sin brillo -supongo que ahora estarán felices...- su vista no apuntaba hacia ningún lugar, aquel iris incoloro se movía sin encontrar algo en que posarse.

Mientras, sus cinco hermanos tapaban sus bocas ante la acusación, arrugaban sus frentes en una mueca de dolor y tristeza al tiempo que las lágrimas del quinto y sexto hijo se comenzaban a desbordar.

-Ka-Karamatsu-nissan...- dijeron al unísono los dos menores mientras la culpa comenzaba a estrujar sus corazones.

Los pequeños ojos de Choromatsu temblaban como nunca antes, mientras acercaba una de sus manos hasta el hombro de su hermano -Kara-