Capítulo 3.

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Los tres niños fueron a casa de Asley a recoger sus cosas. Esa casa le traía muy buenos recuerdos, despues de todo crecieron allí.

-Como vivimos cerca podemos venir algun día- intentó consolarlas Tom.

-Tienes razón- dijo Asley-. Vamos a llevar esto a tu casa.

Cuando estaban bajando las escaleras Asley se tropezó y cayó rodando por ellas. Pero cuando se levantó no sentía ningun dolor, como si no hubiera pasado nada.

-¿Habéis visto eso?- dijo Lily asustada señalando a la puerta- Ha sido como una sombra.

-Es un absol- dijo Tom con tranquilidad-. Solo las personas que han perdido a alguien cercano a muy corta edad los pueden ver. Son revuerdos vivos. Como fantasmas pero mas parecidos a un ser vivo, e intentan protegerte, normalmente los que pueden verlos tienen uno más apegado a ellos. Vosotras, al igual que yo, perdisteis a vuestro padre de muy pequeñas, por eso los podeis ver.
-¿Absol? Nunca lo había oído- dijo Asley.

-Si, mi madre me hablaba mucho sobre ellos cuando era pequeño, para que olvidara a mi padre y no estuviera triste. Ella los puede ver, pero nunca me contó quien es el suyo. Por cierto conmigo va mi padre.

-Volvamos a casa- dijo Lily de repente.

-¿Que pasa?

-Ehh... nada, es solo que tengo frío.

-Acompañala- le dijo Asley a Tom- ahora voy.

Cuando se alejaron Asley salió corriendo hacia el final de la calle. Había un grupo de niños en corro y en el medio estaba otro, tirado en el suelo.

-Dejarle en paz- gritó Asley casi involuntariamente.

-Y si no queremos ¿Qué?- dijo el más mayor en tono burlón-¿Acaso nos vas a pegar?

Empujó un poco a Lily hacia atras y el rsto de los chicos se acercaron dejando al niño en el suelo.
Tras un rato observándola uno de ellos retrocedió.

-¡Mirarle los ojos!-gritó algo asustado.

Los ojos de Asley se habian vuelto negros con el iris de un azul muy claro casi blanco. Entonces algo parcecido a una nube de humo blanco salió de la nada y atacó a los chicos que escaparon sin poder verlo. Entonces el niño que estaba en el suelo se levantó y Asley volvió a la normalidad.

-Hola- dijo tímido- soy Peter. Gracias por ayudarme.

-De nada, yo soy Asley- contestó sonriente.

-¿Qué...qué era eso?

-Ehhh... un absol, ya te lo explicaré. Ven, te curaré las heridas.

Al llegar a casa de Tom su madre le curó, pero había algo en él que no convencía a Tom. Aunque como confiaba en Asley y su madre tampoco se había quejado decidió dejarlo pasar. Entonces apareció el perro de Tom.

-Hola Marte- saludó Peter.

-¿Cómo sabes que se llama Marte?- preguntó Tom confuso.

-Me lo ha dicho cuando llegó

-¿Puedes hablar con él?- dijo Lily entusiasmada.

-Bueno más que hablar es que se lo que piensa e interpreto sus sonidos.

-Cambiando de tema- interrumpió Asley- ¿Viste el absol? ¿la nube de polvo?

-¿Un absol? Yo no vi nada. Solo te vi a ti que pusiste los ojos en blanco y después algo, que parecía enfadado, atacó a los chicos. Oí como se acercó.

-¿Oirle? No puedes oír a una bsol si no lo ves- dijo la madre de Tom- al menos hasta ahora no hay nadie que lo haga.

Asley empezó a pensar en lo que le acababa de decir Peter mientras acariciaba a Marte y entonces se le ocurrió una idea.

-Señora Dear ¿un animal puede convertirse en absol?- le preguntó.

-Si, claro que puede. Si se le da un cariño especial cualquier ser vivo puede ser un absol.

-Muchas gracias- ahora ya estaba segura-. Lily, Peter venir conmigo.

-¡Eh! ¿Y yo?- dijo disgustado Tom.

-Mejor quédate con Marte, ya te lo explicaré.

En Busca De ShimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora