7 Days

Sexto día: Sábado

Narra Bon:

Desperté en la mañana escuchando lo que parecía ser mi padre, el cual seguramente se habría ido a trabajar o yo que sé.

Ayer... Onnie vino a dormir conmigo.

Miré a Onnie el cual seguía dormido, por alguna extraña razón mientras dormía le abracé por lo que al darme cuenta lo solté rápido apartándome un poco.

Onnie gruñó levemente en cuanto me aparté, como si le molestara, pero... Tenía algunas cosas que hacer antes de que despierte, así que le di unas palmaditas en la cabeza relajándolo y me levanté tapándole nuevamente con las sábanas.

Caminé a la puerta para salir del cuarto pero antes le di una última ojeada sin poder evitar hacerle una foto.

Narra Onnie:

No sé qué hora es, pero acabo de despertarme y estoy solo en el cuarto de Bon... Aún que mejor así, me moriría de la vergüenza si nada más despertar le da por burlarse de mi.

Me levanté de la ama, ate mi cabello y con cuidado fui al cuarto de ayer para buscar mi ropa y móvil, cosas de las cuales solo encontré el móvil.

¡¿Dónde esta mi ropa?!

Bajé en silencio buscando a Bon y me asome a ver tanto al salón como en la cocina, pero no estaba.

– ¿Dónde estas estúpido?– me pregunté a mi mismo.

Vi sobre la mesa de la cocina una nota por lo que me acerqué a leerla.

"Onnie, si despiertas antes de que vuelva desayuna algo, cuando vuelva te daré la ropa".

Maldito Bon y yo que podría irme de aquí.

Saqué algo de jugo de la nevera y me heché en un vaso para seguido sentarme en una silla y beber tranquilamente, por lo menos parece que el padre no está.

Un tiempo después oí la puerta y fui a ver quien era, para mi sorpresa era Bon, quien parecía traer unas bolsas.

– ¿A dónde fuiste? ¿Por qué no está mi ropa?– le pregunté mirándole.

– Ah si, perdón, fui a pedirle unas cosas a Joy y Mangle– dijo sin más– ten, vistete con esto– me dió una bolsa.

Yo miré que había en la bolsa y empecé a negar con la cabeza.

– ¡No voy a ponerme esto!

– Te recuerdo que actualmente tienes que obedecer lo que te digo– me miró victorioso.

Mierda, no me lo puedo creer, ¿Por qué tengo que ponerme ropa de mujer?

– Y no te preocupes por la ropa interior, está sin usar– sentenció y subió las escaleras con las otras bolsas.

Maldito... Subí al cuarto que me prepararon ayer y me cambié de mala gana.

La ropa consistía en ropa interior de mujer, la cual no me puse el sujetador; una falda que me llegaba poco más arriba de las rodillas y un top de manga larga más unos zapatos con un pequeño tacón que ni de broma me voy a poner.

Salí descalzo del cuarto buscando a Bon el cual se encontraba en su cuarto.

– Ya terminé– me crucé de brazos mirando a Bon de mala gana.

– Vaya...– me miró de arriba a abajo provocándome un sonrojo.

– ¿Q-qué miras?

– Sueltame el pelo, por favor– me pidió mirándome a los ojos.