Capítulo 13

8.5K 449 71
                                    

Camila miró a Lauren que se estaba riendo de algo que habían dicho las chicas con las que estaba. Eran unas cinco chicas, Lauren y dos chicos que si bien recordaba Camila eran Jason y Steve.
A su lado, Dinah y Normani intentaban mantenerla allí, no había razón para que Camila le hiciera un escándalo a Lauren, ni por celos, ni porque estaba fumando tomando. Camila y Lauren no eran nada. Es más, llevaban cuatro días sin siquiera mirarse luego de aquel día en que Camila le dijo que se fuera de su casa.

La fiesta apenas había empezado eran las once y ya había muchísima gente ebria, pero a Camila no le importaba eso. Le importaba Lauren, quería que dejara de fumar tanto, quería que dejara de beber tanto como lo estaba haciendo y quería alejarla de esas chicas que parecían muy cómodas con la oji verde.

Sí, Camila estaba celosa. Estaba celosa y se sentía una estúpida porque no debería, pero lo estaba y casi explotaba de furia. Sabía que si iba hasta Lauren como si nada a pedirle que dejara toda esa mierda, probablemente la  mandaría al carajo luego de haberla casi echado de su casa.

—Mila, no vale la pena. Déjala. Mira, el lugar está lleno de personas hermosas.—Normani le dio con el codo en el costado. Pero en realidad ella deseaba que Camila se fuera con Lauren y armara una escena para que Lauren se la llevara de allí.

—Además, tú no le puedes reprochar nada. Cuando te fue a buscar la echaste y me parece perfecto. Déjala. No la necesitas.—Dijo Dinah, pero Camila sí la necesitaba.

Era increíble la conexión que había creado con Lauren, el vínculo que se había formado y sin querer los sentimientos que aparecieron tan pronto en ambas partes, pero por supuesto, lo dije mil veces antes y tengo que volver a decirlo, con Lauren las cosas no eran fáciles y Camila estaba comenzando a ser consiente de ello. Si quería algo con Lauren debía luchar por eso y contra gran parte de todo el daño que le hicieron alguna vez a esa chica. Sí, había que soltar varias cosas, ¿no? Pero pónganse en el lugar de una persona a la cual su padre abandonó por otra familia, su madre se quitó la vida dejándola sola, más tarde el hombre que se fue antes vuelve con papeles que aseguran su tenencia y se la lleve a otra ciudad lejos de las únicas personas con las cuales se sentía cómodo, sus abuelos, que se la llevaran a otra ciudad a empezar desde cero con la vida hecha pedazos. Solamente es fácil decirlo y leerlo, pero no es fácil estar en los pantalones de aquella persona.
La vida de alguien dañado es fácil de “arreglar”. Y Camila luego de tanto llorar y pensar había llegado a una conclusión.

—Mira, es que necesito ir con ella, Dinah.—Camila la miró otra vez. Se estaba acomodando el pelo, tenía una de sus típicas remera un poco anchas y unos shorts que le llegaban a la rodilla. No estaba para nada femenina y justamente ese era el lado de Lauren que la volvía loca.—No te preocupes por mí, ¿sí? Me voy a salir con la mía hoy.—Normani sonrió.

—¿Que harás?—Dinah se cruzó de brazos mirándola seriamente.

—No sé, lo que me salga en el momento. No me esperen, ustedes pásenla bien con los chicos.—Les guiñó.—Y cuídense.

Amagó para irse, pero la mano de Dinah se cerró en su brazo deteniéndola.

—Tú estás loca. Ya sé que harás.— Camila levantó las cejas algo divertida.—No hagas esto, menos con ella.

—Dios. ¿De verdad me vas a hablar de esto ahora? Tengo dieciocho años, sé lo que hago. Y estoy enamorada.—Agregó con un poco de vergüenza.—Estoy harta de tantas vueltas. Ojala nunca te enamores de alguien con quien la tienes difícil, Dinah. Es horrible, no tienes idea. La necesito, eso es todo. Las cosas pasaron rápido y acá estoy. Ustedes más que nada me soportaron estos días y tienes que dejarme ir ahora. Por favor.

Plenitud {Camren}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora