Para ti, querido crush

I

Recuerdo bien que te conocí cuando ambos cursábamos la preparatoria. En un inicio yo te veía como un chico cualquiera. Aunque bueno, supongo que así veía a todos y todos te veían así.

El año transcurría, tu hiciste amigos, yo también. Por alguna extraña jugada del destino nuestro círculo de amigos coincidía. Yo le hablaba a tus amigos y tú a los míos. O bueno, yo al menos lo intentaba. Nunca fui alguien que dijera mucho, en realidad siempre fui bastante tímida. Y tú...bueno, tú eras todo lo contrario. Social, divertido, ingenioso, lindo. Bueno, al menos teníamos algo en común...nuestros amigos, pero tú y yo nunca hablamos o al menos no lo necesario para conocernos bien. Siempre fueron simples ¨hola¨. Yo seguía mirándote como un amigo mas. mas bien, un simple conocido.

Recuerdo también que en ese entonces yo estaba súper enamorada de otro chico, German, creo que lo notaste, ¿Cómo no ibas a hacerlo cuando todo el jodido salón se había percatado de ello? Pero obviamente no te molestaba ni nada. Tú no sentías nada por mí. Es decir, apenas y nos hablábamos.

Ese chico me tenía en las nubes, se volvió mi mejor amigo pero no pasamos de ahí. Con aquellos rumores que la clase comenzó a esparcir sobre nosotros y mis intentos fallidos de declararme la amistad termino jodiéndose un poco. No era lo mismo que antes. Pero bueno, ¿para que contarte la historia con él? creo que tú la conoces de sobra, además, no escribo esto para hablarte de lo que sentí por él, sino de lo que tú me haces sentir.

Tras lo que sucedió con aquel chico y al dejar de sentir algo por él, sentí como si una gran venda hubiera caído de mis ojos. Comencé a ver cosas que antes no. Me sentía bien.

Un día paseando por la escuela con Mariana, tu amiga...nuestra amiga. Te vi jugando basquetbol con tus amigos gracias a un comentario que hizo Mariana. Me dijo algo asi como ¨¿Ya viste? Rodrigo es buenísimo jugando. Burlo a todos súper fácil¨ la verdad no recuerdo exactamente lo que dijo. Yo dije algo como ¨Ah, sí. Es fantástico ¿no?¨ Obviamente prestando muy poca atención. En ese entonces no me sentía atraída por ti. ¿Sabes? No sabía que te gustaba ese deporte. Aunque bueno, realmente no sabía mucho de ti, solo que compartíamos salón y amigos.

Pasaron los meses y comencé a sentir eso de nuevo, no sabía realmente que era. Solo sabía que tu provocabas una sensación extraña en mí, me hacías sentir bien, feliz. Era algo parecido a lo que Germán me hacía sentir hace meses. Me sentía rara al verte, mas tímida de lo normal, nerviosa. ¿Acaso me había enamorado de ti? Si era eso no sé exactamente cuándo paso, supongo que fue en alguna de las salidas que compartimos con amigos, no lo sé, pero se sentía bien.

No sé porque pero a finales de año la gente se seguía pensando que Germán me gustaba. No entiendo por qué, él y yo después de lo que paso nos distanciamos un poco. Pero bueno, para ser sincera me daba igual. Si la gente se pensaba eso no se darían cuenta de que realmente el que me gustaba eras tú. Incluso recuerdo que tu comenzaste a molestarme con eso. ¨Germán esto, Germán lo otro¨. Tú no habías notado que me gustabas, y creo que estaba bien. No quería que la anterior experiencia que tuve con Germán se repitiera, tú y yo dejando de hablarnos. No soportaría algo así de nuevo. Era mejor callar lo que sentía...