Tras mi majestuosa, inesperada e insólita llegada en la casa de mi abuela Dorila - Dora - Dorita en Copiapó, todos se alborotaron, y todo se volvió un desorden en la vida de mi abuela, mi tía, mi papá e incluso en la mía, ya que estábamos todos juntos, viviendo en la misma casa de dos piezas. Mi tía tenía su propia pieza, era la menos incomoda de los cuatro. Mi abuela y yo compartíamos la pieza, no era tan terrible, sólo odiaba sus ronquidos. Y el pobre de mi papá dormía en el sofá cama del comedor.
El primer mes, fue horrible, en mucho sentido. Resulta que yo estaba con una prima en Serena cuando le solté la noticia a mi mamá. Pero tampoco fue porque sí, todo comenzó así:
-Hija, el Julián -el único y por desgracia mal hijo de mi difunta tía abuela- nos pidió la casa.¿¡¡¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!? Sabía que ese día tarde o temprano iba a llegar, la casa era cómoda y linda, obvio que el hombre la querría arrendar para sacarle plata. Pero la verdad, no estábamos preparadas, no teníamos donde ir. O al menos eso pensaba.
- ¿Y qué vamos a hacer? ¿irnos con mi yaya?. - Para mi, mi yaya, la mamá de mi mamá, era la única solución para todo, sabia que ella siempre nos iba a apoya en lo que fuera. pero por desgracia, su genio es especial, igual o más amargada que mi mamá, al menos así era con sus dos hijos, mi mamá y mi tío Gigi. Por ende, juntar a mi mamá y mi yaya más de una semana era una catástrofe mundial.
- ¡Tas loca!, el Waldo nos ofreció irnos a vivir con él. Es lo único que tenemos.
Asentí.
El Waldo es la pareja de mi madre, creo que ha logrado aterrizar a mi madre. Un desafío.
Tiene una hija, de unos veintitantos, la Belén, es mas chica que yo de porte, y eso que mido a lo más 1.58. Tiene un carácter que te hace sentir muy cómoda.
Recuerdo que la primera vez que conocí a la Belén, no parábamos de hablar del Justin Bieber, eramos unas Beliebers total, nos sabíamos hasta lo que cagaba. En el 2012 estaba de moda. Y en el 2013 fui a su concierto. Yo lo amaba, me iba a casar con él, me iba a mudar con él, íbamos a tener tres hijos, y yo iba a ser la Señora Bieber. Era el plan de vida más perfecto que tenía. JyA por siempre.
Lamentablemente, a principios del 2014 él cambió tanto, que ya no sabía si me amaba, o si yo lo amaba a él. Nos alejamos, me volví una mezcla de Rockera, rapera y emo, y él, dejó de ser el hombre de mis sueños.
***
Luego de pasar año nuevo con mi nuevo papá y mamá, en nuestra nueva casa, me vine de vacaciones a Copiapó, como era de costumbre. Y mi prima de Serena, la Catita me invitó a quedarme unas dos semanas con ella.
Todo marchaba bien, hasta que una noche...
- Hija, voy a retomar mis estudios
-¡Que bueno mami!, ¿Cuando empiezas?
- En marzo, pero...- Pero..., maldito pero!.
- Voy a estudiar en la noche, te tendrás que quedar un rato con el Waldo.
¿¡¡QUEEE!!?, ¿Mi mamá estaba loca?, lo conocía hace menos de un año. No, no, no.
-Entonces me voy a vivir con mi papá.
¡PIIIUM!. MOMENTO EXACTO EN EL QUE QUEDÓ LA CAGÁ.
Mi mamá luchó, con pacos, con amenazas, con todo para que volviera a Santiago con ella, pero yo no quería, quería quedarme ahí. Con mi papá, mi abuela y mi tía, ahí me sentía bien, me sentía niña.
Buscarme colegio, no fue para naaaada fácil, intenté en varios, entre esos el Liceo Católico. Mi hermano estaba ahí, el hijo perdido de mi padre, así que pensé que entraría fácil, ya que la Bruja (Mamá de mi hermano y ex polola de mi papá, que en ese año estaba intentando conquistarlo de nuevo...) intentó hacerme la movida, pero ya estábamos en marzo, y mis notas no eran de mucha ayuda, ya estábamos casi resignados a que tenía que hacer un año sabático, y de repente entra mi papá.
- ¡HIJA! ENCONTRÉ COLEGIO, TIENES QUE IR A DAR LA PRUEBA AHORA, APURATE!- ¿Prueba?, mierda, cagué. ni cagando entro, no sé nada, casi repito de nuevo. Es mi fin. Perdón por decepcionarlos familia. me voy a suicidar.
***
Colegio de Ates Marta Colvin. Era un colegio, que no tenía ni pinta de colegio, la fachada era una casa azul con amarillo.
Entré a dar la prueba, y como era de esperarse, no sabía ni una weá.
- Si necesitas ayuda me dices no más ¿ya?- me dijo una señora de edad, tenia el pelo rusio decolorado. Diooos. Pero me pareció simpática. Hasta que caché que mi papá podía estar pasando plata de más para que me dejaran entrar.
Me dieron los resultados altiro, según la directora quedé, según yo... mi papá pasó más plata.
Partimos al día siguiente a comprar los materiales y el uniforme. ¡YUPI! la Anto tanía colegio.
El primer día me sentí como un bicho muy raro, era un colegio muy pequeño, todos se conocían entre sí, el patio era muy chico, las salas también. Eramos 20 alumnos cursando el 7ºA. era el único 7º que había.
los primeros días la mitad del colegio me quedaba mirando, y como pajarito nuevo, obvio, no faltaban los jotes, más encima que era un año mayor, tenia 13.
Durante las primeras semanas muchos se intentaron acercar a mi, unos de octavo, otros de sexto, puros weones. Mis compañeros eran bastante agradables y unidos, a pesar de que no todos se llevaban, no recuerdo una pelea, o alguien que no hablara con otra persona. Me encantaba.
Las clases eran bastante peculiares, pues, era un Colegio de Artes, tenía clases de teatro con el profesor Alex, jeje siempre fui muy vergonzosa y floja en teatro, así que me conformaba con el 4.
Habían más horas de artes, cuatro a la semana. Y clases de música, uno podía elegir entre violín, teclado o guitarra. Yo no le hacia a ninguna, sabia tocar la flauta dulce, las típicas canciones
Sol La Sol MI
Sol La Sol Mi
Re Re Si Si
Do Do Sol...
Noche de paz
Noche de amor...
Así que deicidí entrar a lo que se veía mas entretenido y fácil, guitarra. CUECK.
Por lo demás, las clases eran normales, con un horario de mierda debido a las clases extras que tenían. De ocho a una de la tarde. El descanso para ir a almorzar y volver a las 3:25 a la tortura. De las 3:25 a 18:40, si es que tenias suerte de no ser tan pajaron para meterte a al taller de coro u orquesta...
Sí, yo fui lo bastante pájara y entré a orquesta en séptimo y en octavo a coro.
¿¡QUE CHUCHA SABIA YO DE TOCAR EN UNA ORQUESTA!?, PEOR, ¿¡COMO CHUCHA ME DEJARON ENTRAR A COROOO!?, por suerte no era la única que rompía los tímpanos.
