Era el primer día en mi nueva escuela a la que tanto anhelaba entrar su nombre era Watermelon High School, es una prepa en la cual contiene un campus. Me acababa de mudar hace poco así que fue un poco complicado para mí adaptarme, pero no sería tan difícil como pensé ya que en esta misma escuela se encuentra mi mejor amigo desde la infancia eso facilita un poco las cosas.
-AAAHHHH!!! SE ME HIZO TARDE Y EN EL PRIMER DÍA, ¿¡QUE ACASO ESTA COSA NO SONÓ?!
Bajé corriendo lo más rápido que pude, allí estaba mi mama recibiéndome con una sonrisa.
-¿David vas a desayunar?
-No, se me hizo tarde. Gracias de todos modos nos vemos al rato.
Corrí lo más rápido que pude y perdí el autobús.
-(Suspiro) Tengo que llegar de alguna manera.
Me acorde que al llegar a esta ciudad vi un atajo hacia la escuela, pero la pregunta era ¿Acaso aún me acordaba por en que camino llegaba al atajo?
-Aaahg ¡¿Por qué me pasa esto a mí?!
De alguna manera tenía que llegar así que empecé a correr lo más rápido que pude y por fin llegue, no a tiempo pero tampoco muy retrasado, primero lo primero ir a registrarme tenía que llenar unos papeleos ya que me iba a mudar a una habitación del campus (Sera más fácil porque si vuelvo a despertar tarde podré llegar más rápido) y luego ir a buscar mi aula, lo cual no fue tan difícil ya que un día antes había ido a ver las instalaciones, no sabía muy bien mi horario así que tenía una idea de lo que me tocaba, al llegar al salón pedí permiso para pasar, la profesora me pidió que me presentara a mis nuevos compañeros.
-Hola mi nombre es David, es un gusto conocerlos, espero que nos llevemos bien.
Luego me fui a tomar asiento, me sentí muy incómodo ya que no conocía a nadie y eso me irritaba, cuando escuche que alguien me hablaba.
-Hola mi nombre es Jorge mucho gusto en conocerte.
Allí estaba, la primera persona que me habla en todo el día, estaba alado de mi sonriéndome y extendiéndome la mano.
-Hola, mucho gusto Jorge.
Le tendí la mano en muestra de educación a lo que el amplio más la sonrisa, que daba una imagen muy amable y a la vez agradable.
Acabada la primera hora de clases, esta persona a la cual acababa de conocer hace unos instantes me volvió a hablar.
-¿Hace cuánto que llegaste?
-¿A la escuela? Hace unos minutos.
-*Risa* ¡hablo de a la ciudad!
-Aaahh, hace un par de días.
-¿Te mudaras al campus?
-Sí, pero aún no sé cómo funciona eso de las habitaciones, disculpa ¿tú vives aquí?
-Sí y sobre las habitaciones te van a asignar un compañero de habitación, el día que te mudes te dirán con quién estas.
-Gracias por decirme.
-Cualquier duda que tengas con gusto te responderé.
-Buenos días.
Entró el profesor así que no seguimos hablando, la clase empezó y la verdad se me hizo interesante tal vez porque es mi primer día aquí, la clase concluyó.
-Por fin, descanso, tengo tanta hambre.
-¿Te parece si comemos juntos?
-Sí, no conozco a nadie y no sería mala idea.