°HAIKYUU°| One shots| "El Nuevo Inicio"

Parte 1 Sin Título

Como era de esperarse, el balón que tocaba mi piel y dejaba rojo después de alguna recepción bastante brusca me parecía placentero. En realidad me encantaba absolutamente todo lo que se relacionara con el voleibol, incluso los raspones, moratones etc; que se hacen al caerse y es que para mí los raspones, moratones torceduras y todo lo que se pueda causar en un partido me parece una marca de alguna jugada que he salvado. No me molestan, pero el que tengas un ligero moraton por el simple hecho de no haber dejado caer el balón, es una sensación que solo un jugador entendería. El pensar que por esa salvada, ese saque por el que tanto practicaste, esa recepción perfecta, ese bloqueo que impiden los remates y esa sensación cuando la palma de tu mano toca el balón mientras tu saltas en el aire para anotar el último punto o sea el remate, define que tanto tiempo es el que te quedaras en la cancha.

Mi posición me encanta. Me fascina, me emociona jugar en mi posición, salvando los bloqueos de los remates fallidos, recibiendo los saques más potentes que el contrarío tenga para darme, porque si algo he aprendido, es que si fallo la recepción de los saques fuertes que van con la seguridad de anotar un punto directo, es porque nadie excepto yo, es el capas de recibirlo.

Necesito tener la mayor confianza de mi equipo, que no importa el fallo que cometan, yo estaré ahí para salvarlos, para que el juego continúe y para poder seguir estando en la cancha. Tal vez no pueda pelear en el aire, pero mi terreno es en el suelo.

Un viejo amigo, de la preparatoria, que estaba en el equipo de voleibol, Hinata Shouyou para ser precisos, tenía una frase que parecía que fue creada para él; "Si obtienes alas es lógico intentar volar", lo aprecio mucho para ser sincero, ahora mismo si no me equivoco, está en el equipo nacional de Japón. Si, cumplió su sueño de convertirse en el pequeño gigante, su número era el 10, un titular del KARASUNO, donde también jugué como libero. Lo admiro, bueno, admiro a todo mi equipo, pero nos separamos una vez que salimos de la preparatoria, hasta hace poco que me enteré de Sho, me gustaría volver a jugar con ellos pero sinceramente, o al menos yo no puedo.

Supe de Daichi, el ex capitán del Karasuno, no hemos hablado desde que salimos, no sabía nada de él. Lo último que supe es que se convirtió en el nuevo entrenador de Karasuno, Ukai-kun que en paz descanse, murió hace poco, no fui al entierro, porque sé que los demás del equipo irían y no quiero que me vean. Me armaba de valor para ir a algún de otro partido de mi ex equipo, pero simplemente los recuerdos me atormentaban cada vez que pisaba la cancha de vóley. Y al enterarme del nombre del entrenador, mis deseos por ir se esfumaron.

Aun hablo con Azumane, de vez en cuando el me visita e insiste en ir al Karasuno, pero siempre estoy decaído, lo único que me animaría sería volver a jugar como antes y con mis viejos amigos. Azumane es el único casado, según la información que se. No puedo evitar recordar la cabellera de Azumane, siempre lo molesto y de vez en cuando me saca una sonrisa, me gusta estar con Asahi, pero él no puede quedarse siempre conmigo. Me conto que aun juega, en un equipo bastante raro la verdad, nunca había escuchado de el. El Hebande creo que se llama. Me alegra saber que aún le apasiona el volei.

Hablando de apasionar, Sugawara, está en el Nacional de Japón, si, esta con Hinata, creo que sus lazos se unieron más cuando se reencontraron en la selección, de vez en cuando me manda mensajes de texto, preguntándome como sigo, siempre le contesto que bien, aunque no sea cierto, pero conocemos a Mami Suga, y se preocuparía por mí, cosa que no quiero, lo que quiero es que se concentre en ser el armador oficial. Me siento orgulloso de él, pues dejo sus miedos para convertirse en el armador oficial de la selección.

Sobre Tsukkishima y Yamaguchi, lo único es que, los dos se alquilaron un departamento para ellos. Son mejores amigos, más que en preparatoria, desde que Kei paro el remate de Ushijima, su actitud cambio para bien, creo que dejo el volei. Sé que le gusta porque cada vez que hay partido tanto el cómo Yamaguchi y Azumane, se reúnen en mi casa, nunca termino de ver los partidos, me duele. Sobre Yamaguchi, él es un experto ahora de los saques con salto flotante. Ayuda a Daichi y a su equipo a dominarlos para usarlos como armas, tal y como Yamaguchi lo hizo. Y cumplió su promesa de anotar 10 puntos seguidos. Lo logro en nuestro último partido, o bueno, mi último partido.

Al parecer Tanaka sigue viviendo con su hermana, ya no lo veo, pues el siente culpa, solo sé que se la pasa viajando de un lugar a otro, es difícil para él lo sé, pero es más difícil para mí. No tengo nada más que decir de él.

Kageyama, el genio de las colocaciones, se terminó yendo a Tokio, creo que debes en cuando lo llaman para las conferencias de los aficionados al volei, la verdad su historia le gusto a todos, le pagan bastante bien, de vez en cuando viene aquí, pero casi nunca nos juntamos, lo que me alegra es que ya no lo apodan el Rey, ese horrible sentimiento en él se esfumo por completo.

En cuanto mí, el ex libero de Karasuno, Nishinoya, no he vuelto a jugar, nuestro último partido, donde nos enfrentamos a Nekoma, todo paso en un segundo, no entendía en porque me pasaba eso a mí, mis piernas no reaccionaban como siempre, calenté como debía, practique como pude, pero sin embargo, no fue suficiente, yo no estaba al 100% ni al 50% llegaba, simplemente, ya no podía más.

¡Un toque! Grito Tsukkishima, el impacto fue tan fuerte, que salió disparado, no me di cuenta de Tanaka, el corrió también, seguí corriendo y cuando me di cuenta el peso en mi espalda me había dejado en el suelo, antes de caer puse las rodillas para el impacto, gran error, pero fue mi último recurso, mis rodillas se rompieron. No podía más, cuando me levantaron, vi la cara de Daichi, estaba llena de lágrimas, no supe si fue por mí. Esa fue la última vez que lo vi a la cara. No tenían arreglo, me había roto mis rodillas. Quede inválido. Simplemente mis piernas ya no podrían aguantar mi peso, ya no podía seguir jugando volei. Eso fue lo que más me dolió, eso fue lo que me partió en dos, por más que buscaba más opiniones, todos los doctores me decían lo mismo.

Me hice la idea de simplemente ya no seguir en el tema, olvidarlo. Ahora veo todas mis marcas en mis piernas y brazos y lo único que me recuerdan son todas mis experiencias en el Voleibol, el deporte que me hizo feliz, el que me dio una razón para vivir y de pronto me arrebatan esa razón, me dolía hacerme esa idea.

Hace un par de días, recibí una llamada de Daichi, no sabía qué hacer, pero la curiosidad me carcomía, contesté.

-Hey, Hola Yu, ah, ¿me harías el favor de salir de tu casa?

-Supongo- conteste. Me senté en mi silla de ruedas y fui a abrirle. Cuando abrí la puerta ahí estaban todos, Sho, Daichi, Kei, Yamaguchi, Azumane, Kageyama, Suga y.. Tanaka.

Después de quedarme boquiabierto, les dije que pasaran, todos estaban tan altos, menos Sho, él estaba igual.

Pasaron las horas y todo fue como antes, todos conviviendo, todo como debía ser.

Tanaka se animó a hablar; -Bien Noya, tal vez, te preguntes que hacemos aquí, pues, todos estos años hemos estado absolutamente todos, para ti, porque te queremos, eres de nuestra familia, me siento culpable por lo que paso, y esta fue mi idea, y la verdad espero que la aproveches. Hemos estado ahorrando para pagarte las secciones de rehabilitación especial potente, porque queremos que vuelvas a sonreír con nosotros. Dirás que tu caso no tiene solución, pero en verdad estuve investigando y tal ¿sabes?, puedes estar como antes con esta rehabilitación. Quiero que estés como antes, quiero que retomes tu vida, tu pasión, quiero que seas El Libero.- Las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos, no podía creer lo que estaba pasando, en verdad mi problema tenía solución. Puedo iniciar de nuevo.

No tenía palabras, todos se acercaron para abrazarme. Yo solo me ahogaba en lágrimas llenas de alegría.

|Meses después|

Al fin, mi primer paso..