Se sentó hasta la esquina del salón, si se le quedaban viendo parecería el castigado de la clase.
-JAJAJA! que estupideces estoy hablando,- lo dijo en voz baja para que nadie lo escuchara
Se recostó en su silla pensando que sería igual como todos los años de su vida, ignorado, rechazado, golpeado y ofendido por personas que consideraba amigos.
Un fuerte portazo hizo que se sobresaltara del susto, miro serio aquella persona que estaba en la puerta jadeando por haber corrido al parecer.
Después de unos minutos, el profesor llego con una sonrisa y se paró al frente:-Muy buenos días, soy su profesor Armando, mucho gusto y ojalá llevarnos bien este año- lo dijo con una voz muy alegre y una sonrisa con amabilidad.
Pensó que era el mismo discurso que tenían los maestros al presentarse pero no le tomo mucha importancia, giró la mirada sorprendido por el compañero de a lado, era aquel muñequito que habían creado los dioses; muy apenado y con la cara roja, así que se recostó ocultando su cara entre sus brazos mientras se le pasaba.
POV. Jimin
Había corrido toda la maldita escuela en busca del estupido salón, me confundí, perdiéndome en las canchas y baños, hasta que por fin, encontré en puto salón, vi una figura alegre viniendo hacia el salón, a lo cual solo abrí la puerta de jalón haciendo sobresaltar a un alumno,
me senté a lado de aquel sensible niño, su piel tan pálida...-Con unos chupetones en todo su cuerpo le darían un lindo toque,- dije en mis pensamientos.
Desvíe mi mirada hacia el frente, disimulando un poco, para que no sospeche que lo miraba con lujuria, agarre mi mochila y saque mi celular para mandarle un mensaje a mi amigo.
Jimin
Oye Tae ¿almorzamos juntos? Tengo algo fantástico que hablar contigo
Visto 8:30 amTae
Claro, siempre y cuando me invites de comer por qué aquí el rico eres tú.
Visto 8:30 am*****************************