Escorpio es el Padre

Capítulo 3

—Gemelos, tendrás gemelos—La expresión de Capri era inefable, miró mi panza y sonrió con ternura—Te estaría diciendo miles de cosas regañandote y diciéndote sobre el  por que no te cuidaste y eso, pero daría igual por que los bebés ya están aquí y no tienen la culpa de tener una madre despistada.

Me dio un beso en la pequeña barriga que estaba comenzando a crecer, estaba feliz, yo igual. Tengo a alguien que me apoye, lo único a quienes falta decirle son mis padres, suspire y ella me miró.

—Ahora dime quien es el padre, aunque ya me imagino quien es—Comentó seriamente mirándome—Le tienes que decir y esta en su derecho rubia, puede que...

—Escorpio tiene su vida planificada Capri, no puedo ir y decirle que será padre y...eso arruinaría su futuro.

—Tener un hijo no arruinaría nada Piscis—Dijo una voz masculina atrás de nosotras, asustadas miramos al proveniente de la voz.

—Mierda.

Dijimos las dos al unisono, al mirarle bien era Cáncer.

—Debes decirle—Como si fuese un tic nervioso mis dedos juguetearon involuntariamente en mi remera rosada que tenía puesta.

—No debiste escuchar—Capricornio se levanto a la defensiva, queriéndome proteger de todo.

—No, pero necesito hablar con Piscis—Los dos parecían echar humo por sus orejas, iban a pelear y yo no quería eso.

— No peleen, Capri ven— Tome la mano de mi amiga y camine unos pasos hacia un árbol, me giré y estaba ahí Cáncer mirándome, le sonreí— Espérame Cáncer, ya vuelvo.

Él asintió sonriendo. Lleve a mi amiga a una punta del parque y ella me miró impaciente, con el entrecejo fruncido.

— Si quieres lo amenazo y listo Pi— Le revolví el pelo riendo por su actitud.

— Cáncer parece ser buena persona, necesito hablarle así que...

— Me hechas para hablarle—Se cruzó de brazos, sonreí tímidamente y rodó sus ojos— Esta bien, cuando termines me dices como te fue, con lujos y detalles.

— Te quiero amiga— La abracé y ella se despidió de mi con un beso en la mejilla, al no visualizarla más en el parque, me giré y camine hacia el mejor amigo del Padre de mis futuros bebes.

Sus manos estaban en su jean azul que tenía puesto, su mirada iba al árbol el cual estaba con Capri hace unos minutos atrás, era bastante alto y lindo pero jamás me fijaría en él. Con Escorpio era diferente, desde el primer momento supe que él era...mi chico, Su personalidad siempre me conquistó, A pesar de que cuando esta con otras personas finge que es sociable, a veces se cansa de serlo y se pone unos audífonos para ignorar a todos y yo a veces lo molestaba con tal de que me mirara y dejé aquellos audífonos azules. Él es todo lo contrario a lo que dicen en los rumores del instituto, a veces es mejor no dejarse llevar por ellos..

  — Piscis, Piscis, Piscis—Comenzó a llamarme el rubio, lo mire aturdida y apenada.

— Lo siento, Can..digo Cáncer.

— Puedes decirme Can— La comisura de sus labios se elevo haciendo una enorme sonrisa de oreja a oreja.

— Tu sonrisa es hermosa—Dije, se sonrojó y oculto su cara hacia otro lado, yo me limite a observarlo, admito que me encanta su mandíbula.

***

—Si sucede algo me llamas ¿Si?—Asentí y me dio un beso en la frente— Espero que seamos amigos.

Lo observe y su sonrisa no era nada más que sincera, Tal vez, gracias a mis bebes acabo de conocer a alguien que en un futuro será importante en mi vida y en la de los niños.

 — Suelo ser malvada, pero seré una buena amiga Can.

*** 

 — Él es buena persona confía en el Capricornio—Le dije por decimocuarta vez exasperada

Estábamos hace unas horas hablando por teléfono, como siempre, a veces no nos dábamos cuenta de que era tardísimo pero bueno, siempre amaba conversar con ella a altas horas de la noche. Me sentía privilegiada el tener una amiga como ella, sabíamos todo de nosotras, estábamos siempre en esos momentos malos y en los buenos, no me imagino perderla ni en un millón de años.

 —¿Con tus padres que harás?.

 — Supongo que tendré que decirles por teléfono así ellos le mandan un e-mail a la directora, ya que en el tercer mes tendré que dejar la escuela hasta que nazcan ellos y decirles que me manden la profesora a mi casa, la doctora me dijo que es un riesgo ir al instituto en esos meses.

 — Oh,...estaré sola, sola como una ostra— Reí a carcajadas y en eso me entraron ganas de comer algo.

Me puse las pantuflas y camine despacio las escaleras mientas hablaba con ella, Fui a la cocina y puse el móvil en la mesa dejándolo en altavoz, fui a la nevera y saqué unos ravioles que estaban allí para hacer, puse el agua a calentar y dejé la bolsa de ravioles en la mesada, cuando esta hierva los pondré.

—¿Qué estas haciendo?.

—Estoy hirviendo agua para hacer ravioles.

—¿Comerás? ¿A las dos de la mañana Piscis?— Comencé a reírme como foca, me imaginaba que estaba con la expresión de un emoticon.

— Si Capri, como una joven embarazada que soy, comeré de más a parte tengo gemelos y eso significa comer demasiado, tengo que alimentar tres vidas.

— Bueno joven embarazada hambrienta, ¿Tomaste el Ácido Fólico?.

Mierda, dije entre dientes. Suspiré luego de decirle que no a duras penas, su sermoneo de madre comenzó de la A ala Z, creo que fue el más interminable de mi vida, es serio. Visualicé la olla que estaba evaporando me levanté y continuo a eso puse la pasta que me encantaba, era de verduras mi favorita. Tome el Ácido Fólico, tenía un gusto asqueroso aunque a la vez pasable.

***

Miré la alarma por cuarta vez y esta daba las 06:40, tenía minutos en ducharme, cambiarme, comer e ir corriendo al instituto. No quería faltar pero lo hice, quede dormida hasta las 11:28 AM,  fui al baño a hacer mis necesidades, me duche y luego de darme una hermosa ducha de casi una hora baje ya lista para salir a algún lado. Sabía que luego no podría salir así que tendría que aprovechar para comprar cosas indispensables.

Me hice dos sandwich de jamón y queso junto jugo de naranja natual ,y comí gustosa mi desayuno-almuerzo y al terminar vi que eran las 13:37, Capri ya había salido, al ver mi móvil este estaba muerto, ayer me había quedado buscando información sobre los embarazos múltiples en Google. El sonido del timbre sonó, baje de mi habitación ya que había puesto cargar mi móvil y me encontré con tres personitas. Capri, Cáncer y Escorpio.

—¿Que sucedió?— Pregunte sonriente, ellos estaban serios y a la vez parecían preocupados.

— ¡¡A ti!!— Gritaron al unísono y se miraron con asco entre ellos, lo más raro que note fue que Cáncer y Escorpio estaban mirándose como si el uno al otro fuesen totalmente desagradables, Capri miraba a los dos furiosa por que la estaban aplastando en medio de la puerta, yo me limite a sonreír.

  ***

:DDDD Las quiero <3