100 Poemas Para Alguien Invisible

Una Despedida Mas.

¿Y si me tiro por la ventana de la muerte?
¿Bajarías para ir tras de mí?
Oh amor, que dulce engaño el que has cosechado en mí. Confíe plenamente que era una semilla de amor puro la que me habías sembrado. Por eso lo hice a ojos cerrados.

Volveré a las viejas sendas de locura con mi alma, ella quiere hacerlo, y yo también. Y aunque el corazón no piense lo mismo, tarde que temprano lo hará; tristemente quiere conformarse con un puesto mediocre fuera de mí. Cuando vea que ya no hay espacio ni oxígeno para respirar en ti, sé que llamará a gritos por auxilio y ahí, estaré nuevamente para ayudarle.

Lo haré porque quiero que Dios me atrape en sus brazos de consuelo.

Ahora camino por una cuerda sostenida entre dos rascacielos, me he arriesgado porque intento confiar en mí, y en lo que tengo para dar. Si llego al final espero que alguien valore eso y lo sepa conservar.

No pienso compartir mi triunfo con nadie, de hecho ni mi sombra lo sabrá... El silencio será mi mejor aliado y el dolor mi mayor motivación.

Duele dejar los sueños, deseos, proyectos e ideas atrás. Pero hay que hacerlo... Pues nada harán conmigo adelante.

Ahí amor mio, con seis alas de pétalos de rosa color sangre en mi espalda... Y lágrimas tratando de mantener mi equilibrio.

Que suceda lo que el Creador quiera... Aunque prefiero caer en el abismo.

Adiós.