The droplets of love

Nueva aula de clases

*Briza suave ruidos cotidianos* Era el nuevo semestre aquí en la universidad, era hora de la primer clase del día matemáticas calculo avanzado, *Din don* la campana de abertura de puertas resonaba aquella mañana, camine por el pasillo. Un pasillo largo y colorado verdoso con grises a diferentes matices algo ideal para la imagen seria de nuestra institución camine poco a poco hasta abrirme paso a mi nuevo salón de clases, para mi,  calculo avanzadono era mas que un simple pasatiempo, puesto que yo era una joven estudiante de artes, al llegar al salón de clases vi aquella formación de bancas cotidiana, en aquel salón ya se encontraban una tercia de alumnos algo desordenados con uniforme desordenado y cabello mal acomodado, en cuanto a la chica que formaba parte de la tercia usaba la falda casi al borde de dejar ver su pataleta el cabello suelto, maquillaje nada especial *Rizas y murmuraciones*, tome el asiento de enfrente de la fila media, los minutos pasaron y a la larga el salón se lleno y minutos después el profesor llego. El era de tes morena, cabello azabache, ojos café y vestido con un pantalón de color negro y un suéter con camisa abajo se presento frente a la clase. Anotando su nombre en la pizarra *tis pack* el sonido de la tiza en la pizarra mientras el escribía.

-"Profesor. Kuza Kermet"- leí mentalmente -Interesante nombre- murmure para mi misma en un tono bajo para no ser escuchada

-¿Como dijo señorita?- en un instante el profesor con su libro en una mano y su otra mano sobre mi escritorio me miro a los ojos tenia una fría y excitante mirada en la cual me perdí y torpemente quede en silencio.

Cuando pude hablar balbuce -N-nada señor- me sentí aprisionada en aquellos gélidos y culminantes ojos marrón.

Después de eso el profesor se volteo y con libro en manos comenzó la lección de álgebra 1 era el primer tema del temario algo monotomo pero aceptable, durante aquella hora de clases solo se escuchaba los clásicos sonidos que ya acostumbraba *Tiz Pack* el sonido de la tiza en la pizarra *chio chio* los pajarillos clásicos de una mañana tranquila, al paso de la explicación me vi perdida en la resonante y masculina voz del profesor era como un pequeño pensamiento algo erótico lo que pasaba por mi mente escuchando aquella voz mientras pensaba en aquellos gélidos y excitantes ojos marrón. Al paso de 30 min de explicación el profesor anoto con gran habilidad unos ejercicios, comenzaba a resolverlos cuando una voz femenina me distrajo un poco, era aquella chica de la falda corta que llamaba al profesor, mire  por el rabillo del ojo como coqueteaba con el maestro haciendo como si no entendiera, que insulto mas grande hasta un niño de primaría lo podía resolver. Continue resolviendo mirando de vez en cuando el pizarron un par de minutos fue suficiente para comprobar y con piernas cruzadas me dispuse a levantar el lápiz.

-Señor Kermet he terminado- con una voz un poco baja altanera y llena de aburrimiento saque aquella frase.

El profesor que aun se encontraba con aquella chica fue a mi asiento donde le mostré mi libreta de apuntes el analizo rápidamente devolviendo la libreta mirándome con esos ojos.

-Señorita le recomiendo que antes de usar aquel todo altanero y perezoso en mi clase asegúrese que el resultado sea el correcto esto esta totalmente erróneo-

Me sorprendí al escuchar eso jamas me había equivocado *Rizas suaves y rumores*, el profesor volvió con la chica y continuo con su explicación, al termino de la clase, la joven que había ayudado por ser tan perezosa como un rábano entrego al profesor unos chocolates.

-Muchas gracias señorita estoy seguro que si toma méritos sera mi mejor alumna- dijo el profesor a la chica.

-Gracias, me esforzare- al decir eso salio caminando contoneando las caderas como si quisiera incitar al profesor, pronto me acerque yo a el.

-Profesor quiero saber en que me equivoque-

-En nada- dijo de manera altanera

-¿En nada? pero si usted afirmo frente a toda la clase que mis resultados era incorrectos.

-En mi clase señorita Smith se requiere actitud y con ese tono altanero y superior ante sus compañeros no lograra nada. Piense bien en su actitud si quiere continuar en mi clase los profesores de el semestre pasado me han dicho que usted es una mujer brillante pero sus aires de superioridad es una actitud que no pasare por alto, ahora retírese-

Los ojos se me incharón y salí del salón de clase corriendo al jardín y llegando a las escaleras mi corazón que palpitaba alto permitió que mis ojos se llenaran de lagrimas, en toda mi vida jamas había recibido tal humillación como en ese momento tenia un nudo en la garganta y llorando resonaba la voz del profesor en mi cabeza.

Al paso del día con aquella imagen sombría tome mis demás clases y al termino de ellas mire el cielo que ya resonaba con una tormenta gotitas a gotitas, pronto salí y en el poste del alumbrado se encontraba el profesor Kermet con su camisa semi desabotonada y húmeda se podía ver su abdomen y pectoral marcado por unas tenues lineas empapado del cabello con una paleta en la boca, se veía tan atractivo y al pasar a su lado la briza se había combinado con su perfume, una fragancia excitante y tenue que se deslizo por mis fosas nasales, las piernas me temblaron cuando escuche su voz detrás de mi nuca.

-Señorita Smith la he estado esperando suba a mi auto tenemos que hablar-

No se como sucedió pero de un instante a otro cuando recupere el conocimiento de mis acciones ya estaba en el auto en la carretera rodeada del trafico *shif shaf* la lluvia que caía en el para brizas era densa y formaba una neblina. Pronto mire al profesor y dije con voz tímida.

-¿Que es lo que quiere?- mire el suelo temblando me sentía nerviosa

-Disculparme por lo de hace rato en clases no debí hacerte eso pero debes pensar que no todos somos iguales y no todos tienen la facilidad en las mismas cosas-

-Tal vez tenga razón- al levantar la mirada tenia nuevamente al profesor casi encima mio me sonroje mientras miraba esos ojos hermosos sentí su respiración suave y su aroma excitante que me provocaba un deseo por el.

Después de mirarme se coloco en su posición habitual como chófer de su auto conduciendo durante minutos hasta llegar a mi casa después de ello me dejo en la puerta.

-Piense en lo que dije señorita- Después de decir eso asoto la puerta y  arranco el auto.