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Emma salia apurada de la clase Ciencias Politicas, el timbre habia sonado ya hace mas de 5 minutos, y ella aun no salia de ese salon, lamentablemente el profesor de Anatomia era estricto, pero Emma esperaba que la dejara pasar, pero no fue asi.

Resignada, se sento en el piso, esto era frustrante, si tan solo, ese profesor no pidiera su cuaderno de apuntes, todo estaria bien, suspiro cansada.

—¿Tambien llegas tarde eh? —Emma no se percato de que un chico estaba a lado de ella, leia un libro sobre cosas demoniacas— ¿No responderas?

—Perdona me distraje,  ¿No es obvio que lo he hecho?—El chico rio por como Emma habia actuado— Y tú, ¿Llegaste tarde?

—No —Guardo su libro, en una mochila que tenia a su derecha— Me sacaron de la clase ¿Contenta?

—Es lo menos que estoy —Miro como el chico se levantaba— Oye, ¿Cual es tu nombre? —Emma tenia curiosidad, por saber el nombre de aquel chico.

—Mi nombre es Damien Silva —¿Damien? Un nombre muy extraño, para un chico tan... que podia decir ¿Guapo?— Y tu nombre entrometida

—Ey, que no he sido yo quien pregunto el porque estoy aqui —Damien se estaba cansando de la actitud de esta chica, al principio parecia ser interesante, pero ahora, es un fastidio— Soy Emma, Emma Sanz

—¿Vamos a dar un paseo?  —Emma parpadeo muchas veces— Calma entrometida, solo he dicho que salgamos, antes de que el director nos encuentre aqui

—Esta bien —Acepto no por Damien, sino por el miedo de encontrarse con el director—¿A donde iremos?

—A un lugar hermoso y tranquilo, donde solo estaremos tú y yo, ¿Te parece? —El corazon de Emma empezo a acelerarse, no podia ser... Ella no podria enamorarse de un chico que apenas conocia. ¿O si?

Con amor, EmmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora