"Coffee." [Rubelangel]/Pausada

Sipnosis.

El sol comenzaba a asomarse por Madrid. La mañana se presentaba alegre, como solía hacerlo en la temporada veraniega. En una habitación de los múltiples departamentos ubicados en aquella ciudad, dormía de manera plácida un chico de cabello castaño y ojos hipnóticos. Su respiración era calmada y una pequeña sonrisa se asomaba en su pálido rostro. Una débil luz se hacía notar en el cuarto, iluminando parte de las sábanas que cubrían al "bello durmiente."

En otra de las habitaciones, un chico totalmente opuesto a las características del anterior, caminaba de manera sigilosa hacia la cocina. Miraba a ratos la puerta que conectaba a la sala con el cuarto de su amigo.

Amigo: esa palabra a veces se le hacía demasiado dolorosa. Cada día, la tarea por ocultar sus sentimientos se volvía tortuosa; difícil. Anhelaba que las cosas fueran diferentes a las actuales. No quería perder a una de las personas que más lo había apoyado durante los últimos años. Pero, tampoco deseaba quedarse con las ganas. Detestaba la idea de que, quizá, y solo por su cobardía, podía llegar a perder una oportunidad con él.

Tendría que ser cauteloso, buscar por todos lados a aquel chico. Y eso haría.

Lo llevaba planeando desde hace mucho tiempo. Tiempo en el que se cuestionó... vaya que se cuestionó.

Luego de haber terminado de echar la cantidad de azúcar que a su compañero de piso le gustaba, tomó un papel un poco más pequeño que la palma de su mano, dibujó una "m" en éste, para luego pegarlo con un pequeño trozo de cinta adhesiva en la tazita. Y de la misma forma en la que salió de su cuarto se dirigió hacia el de su amigo. Abrió la puerta de manera lenta, verificando que el castaño aún durmiera. Solo ver aquella imagen le proporcionó una paz impactante, tanto que deseó sacarle foto.

Despabiló, y se adentró a la habitación dejando la taza en la mesita de noche ubicada a uno de los lados de la cama donde se encontraba el castaño. Lo miró por unos segundos más sonriendo de manera boba, y es que a veces pensaba que aunque no pudiera tenerlo a su lado como él quería, se conformaba con haberlo conocido. 

De pronto, el chico en frente suya comenzó a removerse entre las mantas, y bastó eso para que desapareciera de inmediato del lugar.

Unos segundos después, el mencionado se talló los ojos seguido de un bostezo. El sueño invadía cada parte de su cuerpo, y las ganas de seguir durmiendo seguían ahí. Un dulce olor cruzó por sus fosas nasales, haciéndole suspirar. De inmediato, la imagen de su pelinegro amigo se posó en su mente. Sólo él sabía preparar un café que emanara aquél olor; tan dulce pero a la vez amargo. Giró su cabeza en dirección a la puerta, tratando de imaginarse a su compañero con la típica fachada mañanera: su pelo alborotado, su cara adormilada, y saliendo de sus labios uno que otro bostezo en el transcurso del desayuno.

Miró su mesita de noche en busca de su móvil, pero al notar que lo que se hallaba ahí era todo lo contrario, quedó algo desconcertado. Fruncio el ceño, confundido.

De la taza emanaba una hilera de vapor, y el líquido en ella tenía un leve movimiento. Acercó sus manos hasta la mencionada con cuidado, y al dejar descansando el pequeño plato sobre su regazo, vio algo peculiar. Una sensación de confusión total lo invadió. Quitó con cuidado el papel, dejándolo a un lado cerciorándose de que no lo perdería de vista hasta que acabara de beber aquel delicioso líquido.

Después de haber acabado, bajó sus pies del colchón para encaminarse hasta el pequeño estante lleno de sus objetos frikis. Encontró una pequeña libreta. Volvió a su lugar, y buscó en el cajón de su velador un lápiz. Para su suerte halló un bolígrafo, y el delgado tubo que se encontraba dentro del cilindro plástico todavía tenía tinta. Rayó un par de veces en una hoja al azar, y en la siguiente escribió la letra que anteriormente había visto junto a su taza.

No se imaginaba a qué era lo que quería jugar Mangel, pero era intrigante. Dejaría pasar un poco el tiempo para ver hacia donde quería llegar su amigo.

*
Como cuando no actualizas los otros fanfics, pero mientras tu inspiración volaba, aprovechaste el momento e hiciste este aHRE.

Espero que les haya gustado esta pequeña parte relacionada con lo que vendrá más adelante.

Os amo Cabesas de mi coraçao <3 🗿