Era tremenda la soledad, rutinaria y aburrida. Sabía que tenía que salir a comerme el mundo con mi mirada penetrante de amor, de imaginación e ideales casi inalcanzables, soñar era lo que me salvaba de esas horas eternas de soledad y autocrítica, llenas de tristeza, melancolía, lágrimas entre otros sentimientos de angustia casi indescriptibles. Pero no todo es triste. ¡una mujer hermosa! Brillante como el diamante más preciado, su incandescente luz atrae a cualquiera, su magia encanta, sus ojos oscuros brillan más que la luz del sol a pleno día en verano, todo de ella atrae de una manera excitante... Su cuerpo, máxima creación de la naturaleza, su sonrisa me extravía a pensamientos lúcidos de placer. Nos conocimos, como todo joven del siglo XXI, por medio de una red social, era excitante mirar un mensaje de aquella princesa, me adornaba de alegría con un simple "Hola", las redes se convirtieron en mi vicio, pero sólo por ella. ¡Que vició más hermoso!...pasado el tiempo nos tomamos confianza, confiábamos nuestros más íntimos secretos perturbadores, lúcidos, tristes. ¡Confundí amistad, con noviazgo y amor! Estoy enamorado en secreto de aquella joven encantadora. Pero ella cree que es sólo amistad, por su cabeza no pasa que la deseo físicamente para besarla y hacerle el amor. ¡Pero puta madre! Ella no se imagina que cuando no está en línea, escucho sus notas y siento escalofríos adorando su voz. Creía que la soledad se había apoderado de todo mi ser y que por más que luchara no encontraría satisfacción en otras personas, por tener una perspectiva diferente que todos, creía que ellos sólo vivían como animales, los apartaba de una manera grotesca, aún necesitándolos. se que aunque el ego predominara en la sociedad, que tan sólo somos conciencia y carne, pero somos más perfectos de lo que creemos ¿Para qué vivir acompañado de tanta gente innecesaria, cuando en los libros encontraba La Paz y el amor? Era la pregunta diaria que me atormentaba. Creía que el amor o la atracción son sólo estados mentales y humanos de los cuales no estaría dispuesto a convertirme en su esclavo. Lo sabía ¡lo sabía!. Mi entorno social tan sólo es una persona, una hermosa persona. Ella la hermosa mujer de la que me enamore en secreto.