Sigo estando aquí, en el bosque donde entierras tus recuerdos.
Sigo esperando sentada en el arcén de una carretera abandonada.
Sigo siendo la misma ingenua que piensa que algún día volverás.
Irónico¿verdad? Siempre era yo la que amenazaba con irse y resulta que al final tú te fuiste.
Sigo sintiendo el calor de tus brazos. Sigo oyendo tus carcajadas.
Sigo pensando que algún día conseguiré mi recompensa y que por esta carretera abandonada
pasarás con un coche de dos plazas.
Idiota de mí por pensar que desenterrarías mi ataúd de tu bosque de los recuerdos.
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El rincón de los gatos negros
Short StoryMás de 30 relatos cortos esperan a ser leídos por un apasionado de la literatura y del arte de lo lúgubre. Cada una de las historias es distinta a la anterior. Amor, soledad, muerte y crueldad son muchas de las preocupaciones del ser humano que se e...