The boy in the red cape [sterek] {Superwolf}

✨2: Are you Derek?✨

Stiles abrió los ojos e inmediatamente se levantó, aún presa del pánico. Seguía en el mismo lugar en donde se había caído y desmayado, solo que ahora estaba totalmente oscuro y solo la luz de la luna alumbraba ligeramente su alrededor. Quería llorar, pero debía controlarse, tenía que salir de ahí. Ni siquiera recordaba por qué lado había llegado corriendo, para volver en esa dirección.

Decidió que debía moverse, no importaba en realidad hacia dónde. No veía al lobo por ningún lado, así que tal vez podía huir mientras lo que lo persiguió antes no le veía.

Fijó una dirección y echó a correr de nuevo, sin tener idea de a dónde iba, solo esquivando con más cuidado los obstáculos que se le presentaban. Corrió con su cabeza punzándole fuertemente y con su llamativa capa roja ondeando al viento, más no se atoraba porque Stiles siempre la levantaba cuando veía una rama que podía causarle la caída. Stiles forzó más la visita y pudo notar a lo lejos agua. Un lago.

Conocía la historia, sabía que podía ser ese lago. Pero su curiosidad era más grande que su miedo, así que relajó el paso, y se acercó lentamente al agua.

Escudriñó con la mirada la orilla del lago, no era tan grande como contaban, pero si tenía una pequeña cascada bastante alejada de donde Stiles se encontraba.

Stiles siguió mirando mientras caminaba sin hacer ningún ruido, buscaba la cabaña de la leyenda que todos contaban, pero no veía nada. Tal vez ese no era el lago, tal vez la historia era falsa y él sobreviviría la noche y...

- Es peligroso caminar solo por el bosque. - Stiles volteó muy rápido, y lo que vio lo sorprendió. Era un hombre, se veía menor de treinta años, moreno. No llevaba camisa, tenía los músculos del torso más marcados que Stiles hubiera visto jamás y tenía la barba ligeramente crecida. Sus ojos brillaban en un azul intenso, y al fijarse en sus manos, Stiles pudo ver unas garras gigantescas y con sangre goteando de ellas.

Stiles retrocedió y el hombre no se movió, el chico de la capa roja habló sin titubear.

- ¿Tú eres Derek Hale? ¿El Derek del que todos hablan?

- El mismo y en persona, chico de la capa roja. Vete de mi propiedad, o te arrancaré la garganta con mis dientes. - Derek pasó por su lado y Stiles se apartó para que no le tirara.

Stiles estuvo a punto de salir corriendo otra vez, pero recordó que no tenía ni idea de cómo salir. Miró a Derek, quien apartó unas hojas muy grandes, y ante él apareció una desgastada puerta de madera. Derek acercó su mano al pomo pero se detuvo por la voz del chico de la capa roja.

- ¿S-sabes cómo puedo regresar al pueblo? - Derek volteó inmediatamente y fingió enojo. La verdad era que ese chico tan pálido y lleno de lunares le causaba una ternura inmensa. No pretendía lastimar ni siquiera un poco al chico, pero jamás lo admitiría.

- Lárgate. - el moreno abrió la puerta, entró y la cerró de golpe.

Stiles se alejó de la puerta en donde había desaparecido Derek. Ya cuando creyó estar lo suficientemente lejos, se apoyó en un árbol y se dejó caer lentamente hasta el suelo. Se puso la capucha y se tapó lo más que pudo con la capa, agradecido de que le llegara hasta los tobillos y fuera de lana, pues hacia un frío horrible.

Abrazó sus rodillas y comenzó a llorar. Tenía frío y miedo por Lydia. Sus dedos le dolían mucho, así que metió las manos en su capa y se acurrucó contra ella. Sus lágrimas empezaban a secarse y estaba cansado, ni siquiera sabía qué hora era, pero tenía muchísimo sueño, así que cerró los ojos y cayó profundamente dormido.

•~•~•~•

- ¡Hey, oye! - Stiles despertó sobresaltado y con Derek casi encima de él. - ¡Te dije que te largaras!

Stiles se hizo a un lado, sobresaltado, y se dio cuenta de que ya era de día. Su padre debería estar más que preocupado, debería estar más muerto de miedo que el mismo Stiles una noche atrás.

- ¡Mi papá! - Stiles se levantó y Derek lo miró con una ceja alzada. ¿Por qué no había gritado como nena en cuanto le vio? Este chico si que era extraño... Y jodidamente bonito.

Stiles caminó a lo largo de la orilla del lago, tratando de ubicar por donde había llegado la última vez, sin tener éxito.

- ¡Mierda! - exclamó Stiles cuando se llevó la mano a la cabeza y le dolió terriblemente. - Rayos, lo había olvidado...

- Yo no sé cómo vayas a encontrar el camino, ni me interesa, pero lárgate antes de que decida que hoy voy a comer carne fresca. - Stiles escuchó a Derek gruñir detrás de él, y al voltear pudo ver el intenso y anormal color azul que estos tomaban a veces, refulgiendo intensamente. En vez de pensar que era algo totalmente extraño y abominable, Stiles lo encontró totalmente bello, junto con sus hermosas facciones... No parecía para nada malo, ni siquiera cuando fruncía el ceño.

- No sé por dónde... - Stiles comenzó a caminar con resignación, y escuchó otro bufido de Derek.

- Da vuelta en el tronco con la marca de garras, y sigue derecho hasta llegar al pueblo. - Derek se mordió la mejilla e inclinó la cabeza para evitar la mirada del chico de la capa roja. Stiles lo miró con ternura. ¿En verdad era él el terrible y terrorífico hombre lobo que asesinaba a cualquiera que se adentrara a su territorio? A Stiles en verdad no le importaba, a él no lo había lastimado, si salía de ese bosque, estaría agradecido con ese "monstruo" el resto de sus días.

Pero se lo hizo a Lydia. Él le destruyó la cara a zarpazos a su amiga.

- ¿Fuiste tú? ¿Atacaste a la pelirroja ayer? - Derek lo miró y frunció el ceño de nuevo. Stiles lo miraba con miedo y tristeza.

- No, yo no lo hice. - contestó el moreno muy seguro de sí mismo. Él no lo había hecho, y por alguna razón quería con toda el alma que ese chico le creyera.

- Me alegro. - Stiles le lanzó una sonrisa que dejó a Derek en la luna. ¿Pero qué rayos tiene este hermoso chico para hacerme llegar a ese estado de idiotez? - Gracias.

El chico se adentró en el bosque sin detenerse para voltear a donde había estado Derek hace dos segundos, además de que de alguna manera se encontraba increíblemente sonrojado. Y también había sonado completamente sincero y seguro cuando le preguntó sobre Lydia.

De alguna manera sabía que Derek no le había hecho nada a Lydia, y también sabía que estaba muy sólo.

Tal vez después de arreglar todo y ver cómo estaba Lydia, podría volver. Así que sacó la navaja escondida en su bota y fue marcando los árboles para cuándo regresara.

Derek tenía algo hermoso, fascinante, Stiles lo sentía, más no sabía el qué. Pero quería averiguarlo, quería saber porque todos le temían tanto a ese mitad hombre mitad lobo. Tal vez ni psiquiera era él lo que atacaba a las personas que se perdían.

Estaba decidido, si Derek era bueno Stiles sería el primero en probarlo ante todo el pueblo. Después de todo, ¿qué podía perder intentándolo?