Era un día lluvioso, y como solitaria que soy adoro la lluvia tanto como las frutas cítricas, los colores oscuros y los perros ladrando desde lejos, como dijo un autor al que admiro mucho "Los solitarios somos una nueva raza", tenía razón, somos tan diferentes a todos qué tal vez por eso nos consideran "Raros" pero permítanme decirles que solo somos víctimas de los que ustedes consideran "Normales" y pensándolo bien ellos son los raros, pues quien en su sano juicio trata de dañar a una persona que a realmente lo aprecia, un loco. Por eso simplemente me alejé, porque sinceramente no puedo soportar más humillaciones de parte de Charles y de el resto de las personas que se igualan a el. Como Rebecca, detrás de esa cara y cabello lindo hay un alma oscura que solo daña a las personas a su paso.
A veces pienso y pienso, solo me pregunto ¿Cómo son felices haciendo inferiores a los demás? Digo, yo no puedo lastimar tanto a una persona sin sentirme un monstruo, pero supongo que personas como Charles y Rebecca lo hacen ya como pasatiempo.
A veces quisiera ser como ellos, todo sería más fácil, es como si ninguno tuviera sentimientos algunos.
Quisiera vivir sin sentir, así nadie me derrumbaría como lo hacen tan constante, mi corazón está roto en todos los sentidos y razones tengo, principalmente porque papá nunca está en casa, sale del trabajo y va al bar, a ahogar sus penas ya que mamá nos dejo cuando apenas tenía unos meses de nacida, cuando él llegaba ya era tarde y estaba dormida o simplemente no quería verlo en ese estado.
Después de todo, si siempre estuve sola y deprimida, puedo seguir con ello unos años más, o tal vez para siempre.
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Inside
Romance- ¿Aún lo amas? - Me preguntó Rebecca, como si realmente le importara. - No me imagino cómo sería si no lo amara - Mi voz se quebró por completo al ver que Charles estaba justo detrás de Rebecca, escuchando todo lo que sentía, viendo cómo perdía mi...