Me desperté de esa cama tan vieja, tan dañada, que al sentarse se escucha un gruñido, pero tan cómoda a la vez, gracias al líquido frío, que recorrió todo mi cuerpo, llevé mis manos a mi cara para sacarme el agua que estaba allí para mirar el causante de todo esto. Y no sabrán quien era, pues mi madre, nada mas y nada menos
-YA LEVÁNTATE, QUE LLEGAS TARDE A LA ESCUELA- Gritó muy enojada, muy común de mi madre
Me senté en mi cama, agarré mi celular para mirar la hora, salté de la cama, me dirijo a mi closet para agarrar; unos jeans color negro con mi remera de Nirvana y mi vans ya viejas color vino. Me saqué mi piyama ya que estaba mojada, que consistía en uno short y una remera de mi papá, lo extraño mucho, y me coloqué lo ya nombrado. Fui al baño hice mis necesidades, acto seguido me sepille los dientes y mi cabello, por último agarré mi mochila con las cosas que preparé la noche anterior
Bajé las escaleras de dos en dos, como lo hacía siempre, pasé por la cocina y vi a mi madre preparar el desayuno.
-Ya me voy madre- le dije entrando a la cocina, para darle un beso en la mejilla e irme.
-No vas a desayunar- dijo haciendo que paré en frente de la puerta.
-No, comeré algo en el camino- dije para tomar las llaves que están colgadas en a lado de la puerta.
Toqué el botón del ascensor, cuando este llegó, abrí las dos puertas, entre adentro, volví a cerrar las dos puertas y toque el botón de planta baja. Salí del ascensor pasé por el largo pasillo para llegar hasta la puerta, justo cuando iba a abrir esta, algo me detiene, mejor dicho una voz
-Buenos días señorita Camille- dije el de seguridad
-Buenos días- le sonreí amablemente
-Que tengas un bonito día- se sentó, en su escritorio.
-gracias igualmente- abrí la puerta el me retiré de ese lugar, por fin, camine unos diez pasos, más o menos, para llevar a mi auto, toque el botón para que se abrieran las puertas subí a este, deje mi mochila en el asiento de copiloto, puse la llave donde va y arranque.
Cuando llegué al colegio no había nadie, me apuré para nada, apagué el motor, saque la llave, agarré mi mochila, salí del auto, cerré la puerta. Me senté en el segundo escalón a esperar a mi mejor amigo, Scott, y mi mejor amiga, Sarah. Agarré mi celular y tenia mensajes de los ya nombrados, primero me fije el de Sarah que decía; "ya llegó, estoy a unas pocas cuadras"
Le respondí con un simple y cortante "okey" después miré el mensaje de Scott " te ves muy solitaria hay sentada", levanté la morada y hay esta Scott, tiré mi mochila y salí corriendo a abrazarlo, el me recibió, con un fuerte y dulce abrazo- Te extrañé- dijo mirándome, no nos habíamos visto en todas las vacaciones, el se fue con su familia a Australia y pues yo me quedé acá aguantando los gritos de mi madre.
-Te extrañé más- Lo volví a abrazar, me encantaba la sensación de sentir su brazos.
Nos separmos sin dejar de abrazarnos, él me empezó a ver mis labios y yo los suyos, después de 2 minutos de estar mirándonos nos fuimos acercando, más y más hasta quedar muy cercar, sentía su respiración, y seguro que el también sentía el mio. Justo cuando iba a besar esos labios tan carnosos, y hermoso, tocó el bendito timbre, que buen momento para que sonoras.
-Maldito timbre- dije por lo bajo
-¿Qué dijiste-
-Nada, mejor entremos- me separé de Scott y me fui a agarrar mi mochila que ya no era blanca si no marrón por el barro, justo a mi se me da por tirar mi mochila. Esperé a Scott en la puerta del colegio, llegó a lado mio y nos fuimos caminando a la dirección para retirar nuestro horarios.
-¿Qué clase te toca?- preguntó mirando la hoja de horarios
-Historia y ¿a vos?- Lo miré
-También- dijo para tomar mi brazo y arrastrarme hasta el salón
Empezamos a caminar y me dí cuenta de algo falta Sarah
-¿Y Sarah?- dije de golpeé haciendo que Scott se sobresalte, me reí.
-No me dijo nada- levantó los hombros.
-¿Y si la violaron? ¿Y si la mataron y vendieron su órgano? ¿Y si la secuestraron? ¿Y si le robaron?- dije alterada, de parte de Scott solo recibí una risa y un estirón de brazo, me arrastró hasta la clase de historia. Se escuchaban unas voces, ups llegamos tarde, mire a Scott y el hizo lo mismo, acto seguido tocó dos veces el vidrio que esta en la puerta.
Todos los que estaban adentro del aula se callaron, haciendo que me ponga más nerviosa de lo que estaba.
-Adelante- una voz tan hiritante llegó en nuestros oídos.
Agarré el picaporte y lo gire para la izquierda, la puerta se abrió, entramos al salón y todas las miradas se posaron en nosotros. Empecé a sentir mis mejillas calientes, y me empezó a sudar las manos, Scott se dio cuenta de ello y me agarró de la mano para que me calmará.
-Bienvenidos- dijo amable- YA SIENTENSEN- Gritó haciendo que todos se sobresalten
Solté la mano de Scott y me dirijo a un lugar donde tiene dos asientos, minutos después Scott se sienta a lado mio.
Agarré mi mochila toda sucia, por siento, saqué un cuaderno y un lápiz, los puse en la mesa, puse mi mochila en piso. Traté de prestar atención, si traté, por que por más que quiera, no puedo, solo escucho blah, blah, blah y más blah. ¿Dónde está el timbre cuando de verdad tiene que sonar? ¿Dónde?
-Bueno chicos, en la próxima clase tomaré oral de lo todo lo que hablamos- dijo el profesor, cuando sonó el timbre, POR FIN.
-Nunca se me hizo tan larga una clase- dije saliendo del salón, justo en ese momento, si en ese momento se me cruzó un idiota haciendo que todas mis cosas volarán por el cielo, y cayeran quien sabe donde
ESTÁS LEYENDO
You're my valentine
Teen Fiction¿Pueden creerlo? Él chico más lindo de la escuela, el más popular con muchos amigo y chicas, el más tierno, con su mejor sonrisa, el mejor deportista, el que cualquier chica se muere por estar con el.... ¿Se a fijado en mi? En una chica tan sencill...