Capítulo 32

128 6 0
                                    

"No me gustan los juegos al azar,
pero si en algo estoy dispuesta a
apostar es en misma"-Beyoncé 🌹

Capítulo 31: Necesita hablar con él de algo muy importante.

Ya hacia una semana de que Alan me había dicho que quería dar el primer paso, de ser mi novio.
Obvio que no dudé en aceptarlo, eso era lo que realmente quería con él.

Y la verdad, estoy tan feliz. No sólo por mí, sino también por mi hermano, él va a ser papá.

Hacia bastante que no me veo con Emily y Daniela, hoy especialmente hoy quería verme con ellas. Aparte tengo que contarle a Dani que ya estoy saliendo con Alan y a Emily también.

Así que al salir de bañarme mande un mensajes al grupo que tenemos nosotras.

*WhatsApp*

Sav🌙: Holaaaa... ¿Qué les parece si salimos?

Emily💄: Yo si... Yo quiero.

Dani💓: ¿Qué quieres, Emily?😏

Emily💄: A Lucas en mi cama😍

Sav🌙: Oigan par de asquerosas, tenemos que salir porque tengo que contarles algo.

Al terminar de escribir ese mensaje recibí una llamada pero como no leí directamente atendí sin saber quien llamaba.

- ¿Hello?

- It's me.

- ¿Cómo estas bombón? -Sabía quien era, era Alan.

- Mejor que nunca ahora al escuchar tu voz...

- Eres muy tierno...

- ¿Qué harás hoy? Tenía pensado que fuéramos al cine.

- Saldré con las chicas... ¿Podemos dejarlo para otro día, Harrison?

- Claro pequeña, cuídate por favor... Te quiero. -Cuelgo.

Narrador Omnisciente

Mientras que Savannah se preparaba para juntarse con sus amigas, en otro momento dos personas que conocían a Savannah planeaban algo en su contra.

- ¿Ya está todo listo?

- Pues claro, pero... ¿Y si algo sale mal?

- Idiota eso no va a salir mal.

Exacto, dos chicas, un plan, una meta.
Ellas querían destrozar a Savannah.
Y una de ellas quería quedarse con Alan.

Narra Savannah

Caminábamos junto a Emily mientras que Daniela paraba en cada tienda de vestidos, no entiendo porque tanta emoción. Son vestidos, ni que fueran hamburguesas.

Si. Tengo hambre.

- Ya por favor, ¡tengo hambre!

- Esta bien, amargada.

Solo... ¡¿Por qué no se apura?! ¡Me comería a toda una manada de elefantes!

Bueno, no tan así, pero... Tengo hambre.

¿Enserio? ¿Pizzas? No soy muy amante de las pizzas, y eso Daniela lo sabe, hasta vio mi cara.

- Vamos, solo por hoy... Siempre hamburguesas. - No puedo resistirme a su carita de perro así que asiento.

Al terminar de comer yo quería el cosito de la pizza, diganme infantil, pero amaba esa maldita cosa. Cada vez que mamá compraba pizzas yo le sacaba eso en vez de comer alguna porción.

Notaba a Emily un poco nerviosa.

- Em, ¿qué ocurre?

- Na... Nada Sav, solo... Solo estoy algo cansada. -Dijo nerviosa.

Por favor, eso no te lo cree ni tu abuela, solo dime y ya.

- ¿Estas segura? Estas muy pálida, Em.

- Si chicas, estoy... Estoy bien.

No insistimos más, Emily aveces se ponía algo... Rara.

(***)

- Oh miren... Este vestido es precioso, Savannah pruebatelo.

- No, todavía no me han escuchado lo que quiero decirles.

- Pruebatelo y luego nos cuentas, dale anda...

Me empujan hacia el vestidor, así que no me queda otra que probarme el maldito vestido.

El vestido era de color granate, muy bonito para ser sincera.

- ¡Estas hermosa! -Suelta un chillido que hace que todos en la tienda me miren a mí y a mi loca amiga.

- ¿Me escucharán? - Ambas asienten- Bien... Alan y yo... Él y yo estamos saliendo.

Daniela abre su boca en forma de "O" y Emily tiene una cara, como decirlo... De miedo, si miedo, y no está tan sorprendida como Daniela, pero... ¿Por qué?

- ¡No lo puedo creer! Tendrán muchos pequeños amargados. -Yo miro confundida a mi mejor amiga en la forma en que se expreso en la palabra "bebés". Pero rió ante su ridícula palabra.

- ¿Y tú Emily? ¿No vas a felicitarme?

- Claro. -Sonríe falsamente - Te felicito, Savannah. -Responde duramente y me abraza.

¿Por qué diablos actúa así? ¿Acaso ella es estúpida? Le conté que quería estar con Alan mucho después de que ella se peleara con sus estúpidas amigas. Osea Melody y Vanessa.

Hablando de Roma...

- Savannah... -Dice "alegre" que no se lo cree ni el más falso de los falsos del mundo mundial. - Tanto tiempo sin vernos... ¿Como has estado? ¿Y Alan? -Maldita perra.

- Pues... Muy bien he estado, y Alan no lo sé, no lo he visto. -Digo fingiendo lo que hace rato acabo de decir, espero que la serpiente no haya escuchado nada.

- Vamos idiota, tú sabes, cuentanos... ¿Está en su casa? Dinos... Vanessa necesita hablar con él de algo muy importante...

Tú Mi DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora